Suspensión: la gente de Güemes descargó su bronca contra el árbitro

Una noche caliente se vivió en el estadio Arturo "Jiya" Miranda. Los fallos arbitrales polémicos enervaron a la gente que, en reiteradas ocasiones, arrojó proyectiles al campo de juego. Después de algunas advertencias, el árbitro Leandro Rey Hilfer se cansó y dijo basta. Suspendió el partido cuando restaba un minuto de los 9 que había adicionado, por falta de garantías.

La primera reacción fuerte del público local se produjo a los 21 minutos del primer tiempo, cuando a Güemes le anularon un gol que pareció lícito. En ese momento cayeron algunos proyectiles al campo de juego, pero tras la advertencia desde la voz del estadio, los ánimos se calmaron.

En el segundo tiempo otra vez la gente explotó, ahora con el gol de Belgrano. A pesar de las exaltadas protestas de los jugadores, el tanto visitante fue lícito. El partido estuvo demorado durante siete minutos porque, además de esas protestas, nuevamente cayeron proyectiles al campo de juego. El partido estuvo al borde de la suspensión, pero, tras otra advertencia de la voz del estadio, se reanudó.

Ya en tiempo adicionado, ante otro fallo en el que Güemes se sintió perjudicado, la gente volvió a tirar proyectiles y el árbitro suspendió el cotejo.