“Mi hija era muy buena, nunca le contestaba nada a nadie”

Solo el asesino sabe lo que sucedió. En la casa no había testigos. La hija que la pareja tenía en común estaba en la casa de su tía, donde era habitual que quedara ya que tenía una primita de su edad. Paradójicamente esta vez por “fortuna” la pequeña no fue testigo el sangriento hecho.

“Mi nuera lo escuchó gritar. Cuando ella sale al camino la encuentra a mi hija (Verónica) en el piso. Mis hijos y la madre van a ayudarla a ella y cuando yo me enteré que él se había escapado salí a buscarlo”, dijo Ramón Escobar, padre de la joven en diálogo con Noticiero 7.

“Nunca hubo un hecho de violencias entre ellos. Por eso jamás imaginamos que podía pasar esto. Nunca hubo peleas entre ellos. Jamás”, enfatizó mientras remarcó: “Mi hija era una chica muy buenita”.

Nuevamente remarcó: “Era muy buena. No tenía problemas con nadie. Nunca le contestaba a nadie. No sabía lo que era tener un mal día. Mi hija fue muy buena”.