Pericia clave de voz define suerte del “Cura Lastra” en banda narco “nutrida” con droga de Paraguay

La suerte o infortunio de una supuesta organización narco internacional pende de la voz de un bandeño apodado el “Cura Lastra”, la cual será peritada por expertos de Gendarmería Nacional en Buenos Aires y luego la Justicia catamarqueña concluiría la investigación y enviaría a juicio oral.

La presunta banda fue desmantelada en junio del 2019, con redadas simultáneas en Tucumán, La Rioja, Catamarca, La Banda y Las Termas de Río Hondo, a requerimiento del juez Federal catamarqueño, Miguel ángel Contreras.

Cayeron presos, el “Cura Lastra”, dos hermanos bandeños, un termeño, un militar catamarqueño, tres policías riojanos, dos tucumanos y una mujer paraguaya, integrantes de una presunta “asociación ilícita” para “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización”.

Les fueron secuestrados, más de 30 kilos de marihuana, miles de pesos, celulares, coches y 4x4.

Los santiagueños

El rol de los santiagueños no sería secundario. Los gendarmes allanaron la casa de Juan Alfredo Vázquez, en el B° 25 de Mayo y le habrían secuestrado cocaína. Después, “golpearon” en la vivienda de su hermano, Alejandro Rafael Vázquez, en calle Quintana, del B° Agua y Energía. También, en la del “Cura Lastra”. Y en Las Termas, en casa de Mauricio Ricardo Jaime. Los funcionarios incautaron también cerca de $ 175.000.

“La cantidad es anecdótica, ya que podría haberse encontrado 400 o 500 kilos. Lo importante es que el accionar de las fuerzas investigativas nos llevó al núcleo de una organización delictiva con ramificaciones en varias provincias”, subrayó el juez al procesarlos en agosto del 2019.

Atención en Buenos Aires

Ahora, la Justicia informó a la defensa del “Cura Lastra”, Juan José Saín y Pedro Véliz, que se realizará en Buenos Aires una pericia de plana de voz en la División Acústica Forense de la Dirección de Criminalística y Estudios Forenses de Gendarmería Nacional.

El comandante Gustavo Javier Caffarena ya notificó al magistrado las condiciones técnicas de la pericia. Participará personal de la Unidad de Criminalística y Estudios Forenses con asiento en la Agrupación VIII Catamarca, quien mediará en las coordinaciones pertinentes.

Concluido y con eventual resultado óptimo el material sonoro, se obtendrá la toma de la plana de voz del “Cura Lastra”.

La misma se concretará mediante videoconferencia utilizando plataforma indicada por el juez, dado al cuadro de la pandemia mundial. Vale destacar que el bandeño contrajo el virus Covid-19 y su defensa ya ha planteado recursos, en procura de bregar por el arresto domiciliario.

El arte de buscar la verdad con tres métodos especiales

Hay tres métodos para realizar peritajes judiciales de identificación de una voz.

En los ‘80 los expertos contaban apenas con la llamada “perceptual”. Constaba en cotejar la grabación, es decir evidencia, con un panel de diez personas con buen oído. Generalmente, las personas tenían entrenamiento musical, o eran fonoaudiólogos.

La tecnología contribuyó a la conformación de una base de datos de voces, es decir registros grabados de distintos lugares del mundo, para referenciar en técnicas probabilísticas.

Así, la evolución llevó la Justicia a tres grandes métodos para pericias sobre registros de voces: uno de ellos, el perceptual o “subjetivo auditivo”, con un jurado de voces.

Semiautomático

Otro, el método semiautomático. Allí, se miden formantes, con una base de voces en un software que coteja las características de una voz a través de métodos estadísticos.

Y el tercero, el automático. Fue desarrollado en Rusia, España y Argentina. “Es un sistema de identificación de voz que realizaron dos exbecarios de Conicet al que denominador Forensia”.

Los tres métodos se emplean en nuestro país. Los extranjeros, prevalecen en las fuerzas de seguridad. El método argentino lo utiliza en modo de prueba la Justicia.

Las probabilidades

Luego, los funcionarios definen una relación de probabilidades dentro del marco de la teoría de Bayes, que es similar a la utilizada para la determinación del ADN. Así, se logra un valor llamado LLR que es la fuerza de la evidencia que presenta el perito.

Después, la Justicia multiplica ese valor por una probabilidad que no depende de las grabaciones. La relación LLR refleja cuán probable es que la evidencia provenga del sospechoso, o en su defecto de otra persona de una base de datos universal.

La materia prima es la voz del acusado, filtrada a través de un profundo análisis de ritmo, entonación, inflexión, modismos, modo respiratorio, defectos de pronunciación y/o patologías de la voz, etcàl