Encapuchados fingen ser policías, entran a una casa, golpean a dueños, huyen con plata y bienes

Una pareja de comerciantes vivieron un verdadero calvario cuando, al menos tres sujetos armados, con el rostro cubierto con pasamontañas, ingresaron a la casa por la fuerza, gritando: "Policía, policía", los golpearon y los mantuvieron cautivos por más de dos horas para huir con $45.000, garrafas, un TV y una camioneta.

Minutos después de las 4.30 de ayer, un joven de apellido Almaraz arribó desesperado a la Comisaría 14 e informó que sus padres, residentes en la localidad de Tramo 20, en el interior del departamento Banda, habían sido víctimas de un violento asalto.

Junto al joven, los uniformados inmediatamente arribaron a la casa, sobre la Ruta provincial 89, donde se entrevistaron con su dueño, un hombre de 72 años, quien les contó que el violento atraco se registró cerca de la 1.30.

El damnificado explicó que se encontraba descansando junto con su esposa (63 años), cuando escuchó un fuerte golpe en una ventana trasera de la vivienda. Al levantarse a ver qué sucedía fue entonces sorprendido por tres sujetos encapuchados con pasamontañas.

Al grito de "policía… policía" los malvivientes, apuntándole con armas de fuego, redujeron a la víctima a quien le dieron golpes hasta derribarlo al suelo, y una vez en el piso le propinaron patadas, exigiéndole que entregara la plata.

La pareja del comerciante, ante sus gritos salió a ver qué sucedía y también fue atacada por los delincuentes quienes la redujeron. Ambos fueron trasladados hasta una habitación, donde les taparon la cabeza con una sábana y permanecieron encerrados, maniatados, por más de dos horas.

Durante ese tiempo, los delincuentes revolvieron todo lo que había tanto en la casa como en el lugar donde funciona un comercio de rubros generales, desde donde sacaron $45.000, 13 garrafas y un televisor de 32 pulgadas.

Con todo el botín en su poder, los ladrones ingresaron nuevamente hasta la habitación donde estaba el matrimonio, y allí otra vez los agredieron, pidiéndoles más dinero. Ante los dichos de los damnificados de que no había más, se dieron a la fuga, llevándose consigo la camioneta de la víctima, una Renault Suran.

La policía inició un operativo y cierre de rutas para ubicar el rodado y dar con los delincuentes. La Dra. Jacqueline Macció, enterada de la situación, dispuso que Criminalística realizara los trabajos de rigor.

Allí secuestraron un cuchillo y la soga que usaron para atar a las víctimas. La mujer debió ser asistida por los paramédicos, ya que sufrió una crisis de nervios, ante el violento episodio.

Además ordenó que la División Robos y Hurtos de La Banda se traslade a la casa y se entreviste con los damnificados, quienes aportaron datos sobre la vestimenta y otros detalles de los malvivientes, quienes al cierre de la presente edición eran intensamente buscados, por los uniformados bandeños.