En duro debate, Fiscalía y los querellantes solicitaron prisión preventiva para Manfredi

Una dura batalla judicial libraron ayer abogados y fiscal, en la audiencia de solicitud de prisión preventiva en contra del entrenador de básquet infantil, Manuel Manfredi. La jueza Cecilia Vittar difirió su resolución.

En forma virtual, entre las 8.30 y 13.45, las partes fundamentaron en el proceso iniciado el 5 de agosto con la denuncia de Rafael Uriel Grasso. El 11, la jueza María Pía Danielsen, dio luz verde al pedido de detención requerido por la fiscal Jésica Lucas.

Manfredi enfrenta graves cargos: "Abuso sexual con acceso carnal agravado por ser encargado de la educación y la guarda"; "abuso sexual gravemente ultrajante agravado por educación y guarda", "corrupción de menores en concurso real de delitos", artículos 119, inciso 1, 2, 3 y 4 párrafo, Inc. B, artículo 125 en función del 55 del Código Penal.

El imputado presenció ayer la audiencia, desde su lugar de detención en la seccional Novena.

Primero, la fiscal Erika Leguizamón abogó por la prisión preventiva. Invocó "riesgos procesales" e hizo hincapié "en medidas pendientes clave". Citó la "declaración de presidentes de clubes; declaraciones de testigos en general".

Por su parte, los querellantes, Macarena Barrionuevo y Gabriel Coronel Chalfón instaron al dictado de la prisión preventiva, en razón de "tratarse de figuras penales graves. Restan medidas probatorias; las siete víctimas son coincidentes con las circunstancias de tiempo, modo y lugar", subrayaron. "El modus operandi era el mismo: se conducía en

bicicleta, citaba a los niños antes de los entrenamientos; los silenciaba con regalos de zapatillas, más minutos en cancha. Aún no declararon víctimas que no denunciaron por miedo", resaltaron.

La defensa pidió batería de prescripciones y nulidades

Por el contrario, el abogado defensor, César Barrojo, abogó por "el dictado de nulidad de la resolución de la doctora Danielsen". Si el planteo prosperara, es casi seguro que peligraría toda la causa.

También, Barrojo afirmó que toda la causa "está prescripta". Juzgó que a excepción de Grasso, las seis restantes serían abuso sexual simple. Aún así, también indicó que de ser real, la causa de Grasso registraría 24 años de sucedida y también habría prescripto. En síntesis, requirió a la magistrada que al final su representado "sea excarcelado y sobreseído total y definitivamente".