"En esta era nos conectamos más, pero nos comunicamos menos"

Sergio Sinay, al hacer referencia a la temática que abordará este jueves en el hotel Carlos V, acentuó en entrevista exclusiva con EL LIBERAL que en esta era de las comunicaciones "nos conectamos más y nos comunicamos menos", al tiempo que se sintió agradecido por la invitación del Cyac y aseguró que "siempre es un honor y un privilegio" venir a Santiago, lugar en el que vivió su infancia.

"Los seres humanos somos las únicas criaturas que hablamos, que tenemos un lenguaje articulado que transmite pensamientos, ideas y argumentos. Hay otros bichos que tienen su lenguaje, pero no transmiten todo lo que transmite el humano. La palabra por lo tanto, tiene ese poder y ese atributo de que cada palabra puede ser un ladrillo en la construcción de un puente que permita llegar del uno al otro", sostuvo Sinay como introducción al tema que abordará el jueves.

Por lo tanto, puso de manifiesto que el diálogo "es siempre un intercambio de ideas, de pensamientos, de puntos de vista, de pareceres, de gustos, de tantas cosas, entre dos individuos diferentes".

Conexión vs. comunicación

"Dialogar no significa poner dos monólogos paralelos. Muchas veces se cree que se está dialogando cuando dos personas están atrincheradas repitiendo siempre lo mismo desde sus lugares. El diálogo es un tipo de comunicación, que es algo que debemos aclararlo, porque estamos viviendo la era de las conexiones, por lo que hoy nos conectamos fácil todo el tiempo, pero no nos comunicamos, ni fácil ni todo el tiempo", aclaró Sinay en diálogo con EL LIBERAL.

También explicó que la comunicación "es una construcción artesanal no tecnológica, lenta, paciente, requiere mucha escucha y poder ir conociendo la diversidad de aquel con quien estoy comunicándome, dialogando, así sea una persona con la que vivo todos los días, porque siempre es importante mantener la escucha, la mirada, la atención para construir un dialogo permanente".

"Una virtud del dialogo, cuando se produce de verdad, es que crea una suma en la que uno más uno no es dos, sino que es un número diferente cada vez. Cuando dos personas se pueden escuchar, aún en sus diferencias, pueden terminar elaborando algo que no existía antes, una idea nueva, una mirada nueva, un argumento nuevo", amplió.

Blanco y negro

El ensayista, narrador y periodista, graficó también que "típico del que no está abierto al diálogo es aquel que dice ‘para mí, las cosas son blancas o negras’. Si son blancas o negras, hay un color eliminado que es el gris, y el gris es el más amplio, porque si a un tarro de pintura blanca se le agrega una gota de pintura negra, ya hay un gris, y de ahí, y de acuerdo a la cantidad de mezcla que se haga, habrá una enorme cantidad de grises. O sea que el color más rico es el gris, pero no nace solo, nace del blanco y el negro. Eso pasa cuando se dialoga de verdad".

"Ha habido a través de la tecnología una especie de aislamiento, un aislamiento real y una ilusión virtual de comunicación, y cuando las personas se encuentran de verdad, es como que se desconocen o se temen, hay una falta de habilidad para el encuentro", redondeó.

Finalmente, Sergio Sinay se mostró contento de volver a Santiago y aseguró que sus amigos ya le comunicaron "que tienen lista la carne para el asado".