En pandemia, el grupo de devotos de San Padre Pío misiona por lo más necesitados En pandemia, el grupo de devotos de San Padre Pío misiona por lo más necesitados
En tiempos difíciles, en los que la pandemia hace estragos en las familias del mundo y causa desconsuelo en toda la comunidad, hay gente que busca, a través de sus misiones, aliviar el alma de quienes hoy sufren las consecuencias, impactados por las más variadas formas.
El grupo de devotos de San Pío, que pertenece a la parroquia San Francisco Solano, es uno de ellos. Fue creado hace varios años, movilizados por las ganas de dar a conocer la imagen de su patrono, y hoy, en tiempo de pandemia, aunque las tareas se hacen cuesta arriba, encuentran la manera de estar cerca de los santiagueños que no la están pasando bien.
Acompañan a los enfermos a través de oraciones, con intenciones que pueden hacerlas llegar por las redes sociales; trabajan en un roperito comunitario para ser el nexo entre los donantes y los que hoy necesitan un abrigo en su familia; y además se reúnen todos los 23 del cada mes para orar por quienes lo necesitan y acercar las peticiones de los que depositan su confianza en San Pío.
“Somos 10 personas, que mensualmente convocamos a quienes quieran llegarse a la parroquia San Francisco, los días 23, a las 19, para comentar sobre la vida del Padre Pío. Esa fecha, a las 19.20 rezamos el santo rosario, y a las 20 se participa de la misa en su honor, en la que se pide por los enfermos y quienes nos requieran”, comentó Edith, en diálogo con EL LIBERAL sobre una misión poco conocida, pero que sin dudas ayuda a muchos santiagueños.
Respecto de la ayuda a las familias más necesitadas, ahondó: “También tenemos un roperito comunitario Santo Padre Pío. Nos donan ropita de bebés, niños y adultos, y nosotros la mandamos a los comedores, al Hospital de Niños, o a donde la iglesia considere que lo necesitan. Es una acción netamente solidaria, para lo cual necesitamos la adhesión de los santiagueños voluntarios”.
Pero la misión no termina allí. También realizan el acompañamiento a los que hoy sufren dolencias.
“Dentro de la espiritualidad propia de San Pío, también asistimos a los enfermos. En el marco de esta pandemia no hacemos visitas, pero sí recibimos intenciones, para quien necesita de la oración”, comentó Edith.
“Estamos autorizados a brindar ayuda”
El grupo de fieles de
Santo Padre Pío se comunica por WhatsApp
para compartir oraciones, reflexiones y coor?
dinar las acciones de
campo.
“Tenemos un grupo
de Whatsapp en el que
incluimos a quien quiera
integrarlo. Es una forma
de acompañarnos desde
la fe puesta en nuestro
Santo Padre Pío. Allí recibimos comentarios
que nos mandan desde
distintas provincias.
Además, el padre nos
autorizó a trabajar
adonde nos necesitan, y
por ello es que trabajamos en nuestra misión,
que es solamente
acompañar a quienes
nos necesitan”, sostuvo
Edith, integrante de la
comunidad de Santo Pío,
quien adelantó además
que crearán una página
en Facebook para “justamente hablar sobre el
santo Padre Pío” y además “para que la gente
tenga más conocimiento
de lo que estamos haciendo.
Servir en su nombre: devoción en Santiago
“El haber conocido a un santo que haya vivido en nuestro tiempo y recibido los estigmas del Señor es algo muy emocionante, que nos impulsa a todos los que conformamos el grupo a dar a conocer su vida. Muchos no la conocen, pero sabemos que al interiorizarse más sobre su obra, San Pío ganará cada vez más devotos en Santiago. Nosotros difundimos todo lo que tenga que ver con su vida, su misión, su obra, y queremos hacerlo conocer a través de su ejemplo de vida. En él queremos llevarlo a Jesús a cada uno de los fieles”, expresó Edith Cárdenas, integrante del grupo de devotos de la parroquia San Francisco.