Actriz trans santiagueña, en documental sobre diversidad Actriz trans santiagueña, en documental sobre diversidad
El Festival Internacional
de Cine Ambiental
y Derechos Humanos,
que se desarrolló en el
Fórum, proyectó “Trans”,
documental que tiene como
protagonista a Marisol
Brandán, actriz trans nacida
en esta Capital y radicada
en Pilar, en la provincia
de Buenos Aires.
En entrevista
exclusiva con EL LIBERAL,
habló de esta producción
realizada por Aleph
Media, con la impronta
autoral de Agustín Toscano,
director de “Los dueños”
y “El motoarrebatador”.
- ¿Qué significó protagonizar
este documental?
- Visibilizar una violencia
sistemática histórica
que venimos atravesando
la población trans travesti.
También, poner en debate
las niñeces y las adolescencias
trans travesti para que
esto no siga pasando, para
que este genocidio que venimos
atravesando no siga.
- ¿La visibilización
ayudará a generar conciencia?
-Es un documental bastante
fuerte, conciso hacia
el lugar que vamos. En mis
37 años he visto el cambio
socio cultural que venimos
impulsando el colectivo
trans travesti.
- ¿Cómo trabajan
para dar a conocer la
problemática que atraviesan?
-A través de políticas
públicas, de documentales,
en nuestras redes sociales.
El colectivo LGTBIQ + viene
exponiendo lo que sucede
como para ampliar estos
derechos vulnerados que
tenemos como sociedad.
-¿Qué representó
para el colectivo que la
lucha que realizan por
sus derechos haya sido
tomada como una política
de Estado?
-Representó un interés
bastante genuino en nuestras
diversidades que los gobiernos
tomen como acción
esta demanda socio cultural
que venimos teniendo.
-¿Qué valor tiene para
ustedes que se haya
otorgado a una niña
trans su DNI con su
identidad de género?
-Tiene un valor muy significativo
a la hora de posicionarnos
en nuestros derechos
humanos como la
identidad. Aquí hablamos
de la identidad autopercibida
y no impuesta por los
mandatos sociales. En el
2010 una de las militantes
nos ha puesto en valor
de reconocer nuestro derecho
vulnerado y con eso hemos
podido erradicar edictos
policiales que nos perseguían.
En algunos puntos,
siguen existiendo. Hoy,
a 2022, nos parece absurdo
que sigan existiendo estos
edictos en contra de nuestras
identidades.
