"Sigo teniendo los mismos sueños"

Por Pablo Daniel Díaz

@pablodanieldi76

A Leonardo Sequeira le llegó todo de golpe. De jugar la Liga local en Agua y Energía se encontró en Central Córdoba en el Federal A. Y ahí nomás logró el ascenso a la B Nacional. Por pecados propios de su juventud, no pudo explotar. Y cuando parecía que su carrera comenzaba a perderse en la intrascendencia, llegó Marcelo Fuentes y fue como un volver a empezar para este joven bandeño de 21 años.

Ayer, tras regresar de Gualeguaychú, donde convirtió un gol en el 2 a 0 del Ferro sobre Juventud Unida, "Leo" visitó EL LIBERAL y contó que sigue teniendo el sueño de triunfar para ayudar a su familia, pero que ahora está más maduro y ve las cosas de otra manera.

¿Sientes que te estás afianzando en la categoría?

En la primera temporada me había costado arrancar después de venir de una lesión. No pude jugar las primeras siete fechas y me encontré de repente en un Nacional B cuando un año y medio atrás jugaba la liga local. Fue un salto muy grande para mí y de a poco me voy afianzando. Si bien en los torneos anteriores no jugué en mi posición de delantero, hacía lo mejor que podía. Ahora gracias a Dios el técnico me está usando en mi posición natural. Hay que seguir trabajando y mejorando.

¿Alguna vez pensaste en bajar los brazos?

Nunca, porque yo más que nadie sé cómo trabajo el día a día y lo que me esfuerzo para estar. Si bien no jugaba, siempre apoyaba a mis compañeros desde donde me tocaba estar. Todos unidos somos un grupo y si le va bien a uno, nos va a ir bien a todos. Ahora me toca estar y lo disfruto.

¿Fue un volver a empezar con Fuentes?

Cuando viene un técnico, renuevas esperanzas y piensas que ésa puede ser tu oportunidad de jugar. Siempre va a haber una oportunidad y la tienes que aprovechar al máximo. Gracias a Dios a mí se me dio una oportunidad y la pude aprovechar. Ahora me tocó salir, estar en el banco, pero siempre voy a apoyar al equipo.

Pero fue importante que creyera en vos...

Eso también suma un plus. Cuando llegó Marcelo habló conmigo y me dijo que había visto algo de mí, que sabía el potencial que tenía y que me faltaba explotarlo. Me dijo que iba a jugar de delantero, pero si había dos jugadores más en mi puesto, el que estaba mejor iba a jugar, eso siempre lo dice.

El año pasado estabas ansioso por convertir tu primer gol y ahora vinieron dos juntos, ¿ya caíste?

Me acuerdo una nota tuya que me preguntabas si iba a llegar el primer gol y yo estaba muy ansioso. No se me estaba dando y ahora que vengan dos seguidos no lo puedo creer (risas). Eso te lo da el trabajo y la confianza que te dan también tus compañeros, que te apoyan día a día. Yo tengo que seguir trabajando y mejorando muchas cosas para seguir progresando.

Y lo curioso es que fueron dos goles viniendo desde el banco...

En Boca Unidos había errado tres situaciones claras de gol y me sentí mal porque pudimos haber ganado ese partido. Por eso, al otro partido, venir desde el banco y hacer el gol en la primera pelota que toqué fue un desahogo. Gracias a Dios se me está dando a mí y a mis compañeros también. Y sirven muchísimo para el grupo.

¿Sigues soñando con triunfar para ayudar a tu familia?

Lo sigo manteniendo. Si bien en una de las primeras notas que me hiciste tenía 18 ó 19 años y estaba más ansioso por llegar, tengo la misma esperanza. Pero hay que ir paso a paso. Ahora me toca jugar un Nacional B y tengo que hacerlo de la mejora manera. Si después viene algo mejor, bienvenido sea. Pero hay que estar tranquilo y pensar en este grupo que quiere lograr grandes cosas y después pensar en otras. También lo dije porque mi sueño es ayudar a mi familia, mi mamá, mis hermanos. Hemos sufrido un montón desde chicos pero esas son cosas de la vida, hay que seguir trabajando. Yo ahora puedo darle un poco de lo que mi mamá me había dado cuando era chico, se lo estoy devolviendo de a poco. Siempre pienso en ellos, en que los voy a ayudar, gracias a Dios las cosas me están saliendo bien.

¿Maduraste en estos dos años?

Sí. Capaz que hace dos años decía cosas inconscientemente y ahora las piensas y dices ‘pará, no te va a llegar todo tan rápido, tienes que ir paso por paso’. Mi meta es ahora lograr algo muy importante en Central Córdoba. Primero mantener la categoría y si se puede pelear el campeonato, bienvenido sea y estaría contento por eso y más que nada por el grupo muy bueno que se ha formado este año.