River Plate dejó escapar la victoria en Sarandí

River Plate le ganaba anoche a Arsenal 2-0 y la sonrisa del entrenador Marcelo Gallardo era mayúscula, pero la lesión de Milton Casco y la expulsión de Gonzalo Montiel lo complicaron y terminó 2-2 el partido en el Estadio Julio Humberto Grondona, por la octava fecha del campeonato de Primera División.

Cuando todo era reconfortante para River, Sebastián Driussi le permitió imponerse en el parcial y ni bien empezó el segundo tiempo aumentó Gonzalo Martínez con una joya, pero se lesionó Casco, el juvenil Montiel recibió la segunda amonestación y el triunfo de River comenzó a derrumbarse, en especial desde que descontó el uruguayo Joaquín Boghossian, a los 18 minutos. El 2-2 lo obtuvo Joanthan Bottinelli, a los 23.

Así el Millonario tuvo una jornada en la que pareció que se iba a lucir y golear, y que se iba a acomodar en el tercer puesto en la tabla de la competencia doméstica, pero de repente todo cambió, sufrió la roja de Montiel, la lesión de Casco y todas las improvisaciones a las que tuvo que recurrir en la retaguardia, a tal extremo que casi perdió el encuentro. Para peor, a 12 minutos del epílogo "Pity" Martínez también fue reemplazado por una sobrecarga en el aductor derecho.

Y en el horizonte inmediato de River se halla el compromiso por el torneo local ante el líder e invicto Estudiantes de La Plata, que se librará en el Estadio Tomás Adolfo Ducó, dado que el Monumental está alquilado por un espectáculo musical.

En cuanto a Arsenal, sigue sin conseguir un triunfo, pero haberse recuperado de una situación tan adversa y ante un oponente de la calidad de River probablemente lo va a tonificar. River estaba en la búsqueda de su tercera victoria consecutiva, porque el jueves goleó 3-0 a Unión de Santa Fe en Mar del Plata y se metió en semifinales de la Copa Argentina en el que se medirá con el ganador de san Lorenzo de Almagro-Gimnasia y Esgrima La Plata, y venía de doblegar a Atlético de Rafaela 1-0 en Núñez, pero de Sarandí se llevó una frustración y varias preocupaciones.

Arsenal estuvo cerca del tercer tanto, pero le faltó claridad. En el epílogo tuvo una oportunidad River, a los 48, con un remate de Nicolás Domingo desde fuera del área que Pellegrino sacó al córner. En definitiva, River estaba para golear y casi terminó derrotado.