Guillermo evitó hablar sobre Tévez

El técnico de Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto, adoptó ayer un discurso evasivo antes del Superclásico, al eludir cualquier referencia sobre el futuro de Carlos Tévez y asegurar que lo único que tiene en su cabeza es el partido con River, que se jugará mañana en el Monumental por la decimotercera fecha del Campeonato de Primera División.

El Mellizo tampoco quiso confirmar una formación que parece definida (por primera vez en su ciclo repetirá el equipo en relación a la jornada anterior), evitó polemizar sobre la designación de Diego Abal como árbitro y relativizó que en River consideren más trascendente la final de la Copa Argentina, prevista ante Rosario Central el jueves próximo en Córdoba.

"No pude hablar con Carlos. Hoy lo único que tengo en la cabeza es el partido con River, no puedo hablar de otra cosa", contestó Guillermo cuando se le preguntó por los dichos del delantero en la jugosa conferencia de prensa del jueves en Casa Amarilla.

Tévez admitió que este verano decidirá si permanece en Boca, si acepta una millonaria oferta que dispone del fútbol chino o bien si decide terminar su carrera profesional, después de sentirse "saturado" por todo lo vivido en el club a lo largo de este año.

Barros Schelotto no quiso realizar especulaciones al respecto y utilizó palabras medidas para todos los temas abordados durante una conferencia de prensa demasiado insulsa.

"No me importa lo que puedan hacer o decir en River sobre el partido del domingo por el hecho de tener que jugar la final de la Copa Argentina. Me importa Boca. Jugamos un clásico, buscaremos ganarlo y trataremos de seguir mejorando", respondió acerca de la consideración que el rival le brinda al Superclásico de mañana.

En relación con el árbitro, expresó: "Siempre decimos que ojalá pase inadvertido, que no se equivoque. (Diego) Abal está capacitado, tiene muchos años de experiencia. Ojalá haga un buen partido".

"La verdad, con respecto a los arbitrajes me da lo mismo, uno confía y cree en la honestidad. Quien esté me garantiza que va a tratar de hacer lo mejor. Lo único que queremos es que sea tan cuidadoso como lo ha sido en los últimos partidos, como en el penal que le dio a River con Estudiantes", agregó con un dejo de ironía.

Consultado sobre el nivel de Cristian Pavón, respondió: "Para mí Pavón está jugando muy bien. Tiene un promedio de gol alto, un desequilibrio impresionante, una velocidad increíble. Tal vez le faltó dar el pase bien, pero es un jugador joven, a través de los partido lo irá mejorando".

Más tarde se despreocupó por la marcación que pueda tener el mediocampista Fernando Gago, que regresó al equipo hace dos fechas y fue la figura en las victorias sobre San Lorenzo (2-1) y Racing Club (4-2).

"La marca que tuvo contra Racing, con (Luciano) Aued y (Diego) González, la pudo contrarrestar bien. Estará dentro de la parte individual de cada futbolista resolver las situaciones que se planteen en el mano a mano para marcar diferencia", analizó.

Después de aclarar que aguardará la evolución del defensor Juan Manuel Insaurralde y el volante Pablo Pérez para definir la formación, Guillermo arriesgó que el Superclásico puede resultar "un partido abierto", sin desconocer que "la fricción típica de esa clase de encuentros va a estar".

"Nosotros llegamos bien por haber ganado ante San Lorenzo y Racing. Se empezaron a ver en el equipo cosas que antes no se veían, fundamentalmente por la envergadura de los rivales a los que se les ganó. Nuestro afán es mejorar cada semana y tratar de jugar de la mejor manera", concluyó.

Boca, escolta a dos puntos del líder Estudiantes de La Plata (27), visitará a River (19) mañana a las 17 por la decimotercera fecha del torneo.