Los ingredientes del éxito

se define en términos

individuales.

Tener éxito

es que alcances

el sueño, o

los sueños que

querés alcanzar.

Cada uno de nosotros

fue creado

para alcanzar el éxito

en cada área de su

vida. Dependiendo de cada

persona, el éxito puede ser

tener un excelente puesto en

una empresa, tener una familia

plena, tener una casa,

vivir de rentas. Podemos citar

un sinfín de ejemplos. Pero

cualquier éxito que anhelemos

o deseemos alcanzar

se compone de ingredientes

indispensables para que sea

genuino, verdadero, disfrutable

y sustentable a través

de los años. Los valores, la

lealtad, la integridad, la actitud,

el saber que lo merecemos,

la motivación, son ingredientes

que forman parte

de él, tanto en su recorrido

hasta alcanzarlo como en su

permanencia.

A continuación analizaremos

estos componentes.

En primer lugar tenemos que

definirnos a nosotros mismos,

determinar qué tipo de

persona queremos ser, qué

valores son importantes para

nosotros. Los valores no son

las metas o los sueños, sino

un pacto interno que nos

ayudará a elegir con sabiduría,

paz y honestidad con nosotros

mismos. Una meta

puede ser tener un amigo o

un novio, un valor es respetar

a los amigos o a la pareja,

ser honesto. El valor determina

el trato. Los valores

son esas cualidades con las

que nos paramos en la vida y

llevamos con nosotros estemos

con quien estemos y vayamos

donde vayamos. Esos

valores que son nuestro norte,

los que nos señalan el camino,

los vamos profundizando

cada día y son lo que la

mayoría de la gente, lamentablemente,

descubre cuando

se enferma o tiene a un

ser querido que se está por

morir. Bajo esas

circunstancias

e x t r e m a s

muchas personas

recuperan

los

valores impo

r t ant e s

de la vida.

Todos los seres

humanos

t e n emo s v a l o -

res; algunos nos hacen

bien a nosotros mismos y a

los demás. Otros valores hacen

bien a uno solo, y otros

no hacen bien a uno ni a los

demás.

En segundo lugar necesitamos

ser íntegros. Hay gente

que es como los tiburones.

El tiburón no puede dejar de

moverse, porque si lo hace,

se ahoga. Por ello, es que al

momento de elegir y de elegirte

la base sobre la que te

pares determinará si alcanzarás

el éxito o no, considerando

al valor, a la verdad, a

la integridad como factores o

componentes de una persona

exitosa.

En tercer lugar necesitamos

ser leales. Otra de las características

de la gente que llega

al éxito es su lealtad. Lealtad

es compartir valores en

común armando un vínculo

de respeto. Lealtad es saber

cuánta gente puede confiar

en mí.

Y en cuarto lugar necesitamos

revisar qué actitud estamos

teniendo frente a la vida.

Actitud es lo más poderoso

que tenemos, ya que nos

potencia o nos destruye. Por

eso, todo en la vida es cuestión

de actitud. La vida es un

10% de las cosas que nos suceden

y un 90% de cómo reaccionamos

a eso que nos pasa.

Ese 90% constituye nuestra

actitud. Es fundamental

cuidar nuestra actitud.

Para concluir podemos decir

que cuando el éxito está basado

en estos principios, podrás

disfrutar de él sabiendo

que fue genuino, y que este

es el resultado de tu formación

y de tu fuerza interior.

Si tenés alguna inquietud,

podés escribirme a bernardoresponde@

gmail.com. ?