Encerraba a su hija en el baño para ultrajar a su hijastra Encerraba a su hija en el baño para ultrajar a su hijastra
Un vecino de Mailín esperará el juicio detenido, ya que la Cámara de Apelaciones dijo no al planteo de excarcelación extraordinaria, en un dilatado proceso por ultrajar sexualmente a la hija de su pareja (profesora), de apenas 12 años.
El alto cuerpo rechazó el planteo del acusado, de 27 años, detenido en noviembre del 2014, un año y cuatro meses después de ser denunciado por su pareja.
Ella reaccionó aterrada, luego que su hija rompió en llanto y confiara las calamidades sexuales a las que el padrastro forzó a vivir.
Cada vez que atacaba a la menor, antes el personaje encerraba a la hermanita pequeña de la víctima, hija de la unión del individuo con la profesora.
Fueron largos meses de puertas que no se abrieron para la profesora. Recién cuando la historia adquirió entidad jurídica, el sujeto primero fue alojado en la Alcaidía en el Departamento de Seguridad Ciudadana 13 de Añatuya. Después, en la Comisaría 19 de Herrera.
Entre agosto y septiembre del 2015 protagonizó otro escándalo. Se descubrió que actualizaba su Facebook en Herrera, abrazado con su nueva novia.
Su cuenta reflejaba actividad constante. Quizá desde un celular subía imágenes y actualizaba el perfil.
Como si fuera poco, también estuvo preso tres meses. La Justicia lo aprehendió, al sospechar que formaba parte de una banda que robaba y vendía coches desde Córdoba.
Casi cuatro años después de la denuncia, la Cámara de Apelaciones confirmó la elevación a juicio de la fiscal Carola Olivera. Lo más trascendente, garantizó que el imputado seguirá tras las rejas. ‘Abuso sexual con acceso carnal’, es la figura endilgada, por la cual sería juzgado en el primer semestre del 2017.
El perfil psicológico del detenido sostendría que se trata ‘de una persona manipuladora, con trastornos de abandono en su infancia, carente para diferenciar el bien del mal’.
La víctima hoy hace terapia. Tendría pesadillas y destellos de depresión, sumado a sus conflictos propios de adolescente. Por consejo de la psicóloga, ‘ella no debe estar sola’.
