Dolar Oficial: - Dolar Blue:- Dolar CCL:- Dolar Bolsa: - Dolar Mayorista: -

EL LIBERAL . El Evangelio

Evangelio según San Juan 6,44-51.

04/05/2017 01:49 El Evangelio
Escuchar:

Evangelio según San Juan 6,44-51. Evangelio según San Juan 6,44-51.

Jesús dijo a la gente: “Nadie

puede venir a mí, si no lo atrae el

Padre que me envió; y yo lo resucitaré

en el último día.

Está escrito en el libro de los

Profetas: Todos serán instruidos

por Dios. Todo el que oyó al Padre

y recibe su enseñanza, viene

a mí.

Nadie ha visto nunca al Padre,

sino el que viene de Dios: sólo

él ha visto al Padre.

Les aseguro que el que cree,

tiene Vida eterna.

Yo soy el pan de Vida.

Sus padres, en el desierto,

comieron el maná y murieron.

Pero este es el pan que desciende

del cielo, para que aquel

que lo coma no muera.

Yo soy el pan vivo bajado del

cielo. El que coma de este pan vivirá

eternamente, y el pan que yo

daré es mi carne para la Vida del

mundo”.

Comentario

“Nosotros, aunque somos

muchos, formamos un solo

cuerpo, porque comemos todos

del mismo pan” (1C 10,17). ¿Qué

es este pan que comemos? El

Cuerpo de Cristo. ¿Qué llegan a

ser los que comen de él? El Cuerpo

de Cristo; no una multitud sino

un mismo Cuerpo. Al igual que

el pan, compuesto de tantos granos

de trigo, no es más que un

único pan en el que los granos

desaparecen; al igual que los

granos siguen formando el pan,

pero es imposible distinguirlos

dentro de la masa en la que subsisten

tan bien unidos, así también

nosotros, todos unidos con

Cristo no formamos más que

un todo. En efecto, un miembro

no se nutre de un cuerpo distinto

del que se nutre otro miembro

del mismo cuerpo, sino que es el

mismo Cuerpo el que los nutre a

todos. Por esto el apóstol Pablo

ha añadido: “Participamos todos

de un mismo pan”.

Pues bien, si ahora todos participamos

del mismo pan, si todos

llegamos a ser el mismo Cristo,

¿por qué no vivimos todos la misma

caridad?... Es eso lo que ya

demostraban nuestros padres en

su tiempo: “en el grupo de los creyentes

todos pensaban y sentían

lo mismo” (Hch 4,32). Ahora no es

igual; sino todo lo contrario. Y, sin

embargo, hombre, es Cristo quien

ha venido a buscarte, a ti que estabas

tan lejos de él, para unirse a

ti. ¿Y tú no quieres unirte a tu hermano?...

En efecto, no tan sólo nos

ha dado su cuerpo, sino que, así

como la primera carne, sacada

de la tierra, estaba muerta por

el pecado, él, por así decirlo, ha

introducido en ella otro fermento,

su misma carne, de la misma

naturaleza que la nuestra pero

exenta de todo pecado, llena de

vida. El Señor nos la ha dado a

compartir a todos para que, alimentados

de esta nueva carne,

viviendo en comunión los unos

con los otros, podamos entrar

en la vida inmortal. ?

Lo que debes saber
Lo más leído hoy