Ciertos tramos de las Rutas 64, 9 y 34 son considerados por la policía como los más peligrosos
Los tramos críticos de las rutas nacionales y provinciales con mayor presencia de animales sueltos son la ruta 64, entre Santiago del Estero y Catamarca hacia el oeste; la 9 al norte en las inmediaciones de Chañar Pozo; y desde Loreto hasta Ojo de Agua hacia el sur; y la 34, entre Garza y Herrera, en el sudeste, según detalló la Policía Montada de la Provincia.
Amén de que la mayoría de las rutas que atraviesan la geografía provincial padecen el mismo problema, los puntos más riesgosos coinciden con la mayor ocurrencia de violentos accidentes de tránsito que en muchos casos terminan siendo mortales, provocando verdaderas tragedias familiares; y en otros se convierten en impresionantes milagros, cuando las víctimas resultan apenas heridas o increíblemente ilesas.
Además, se observa cierto fenómeno por el cual, no sólo las rutas señaladas deben ser consideradas como de riesgo extremo, sino también las tributarias o cercanas, ya que sobre sus banquinas también suele extenderse la peligrosidad de los animales que deambulan sin control, en muchos casos en tropillas numerosas.
Las peores
El comisario inspector José Barrera, del Cuerpo de Policía Montada de la provincia, especificó: “La 64 y la 9 son las rutas que más animales tienen. En la primera, la peor parte es la franja que se encuentra entre la ciudad capital de Santiago del Estero y el empalme con la ruta 24, que, girando hacia el sur, se dirige hacia Villa La Punta y Estación La Punta”. Este último sector, también está regado de animales de todo tipo, aunque abundan los vacunos, yeguarizos, porcinos y caprinos.
En cuanto a la nacional 9 o la Panamericana, una de las dos rutas más transitadas de la provincia, Barrera señaló como el punto álgido “cerca de Chañar Pozo hasta poco antes de la ciudad de Las Termas”. “Esas son las que estamos trabajando últimamente”, detalló en alusión a los operativos de secuestro de los ejemplares que los usuarios de las rutas denuncian o que ellos directamente detectan como sueltos y sin presencia humana que los controle o dirija.
Además, agregó que “en la ruta nacional 34, la zona crítica se ubica entre las localidades de Garza (en el departamento Sarmiento) y Herrera (departamento Avellaneda)”.
Igualmente, admitió que “la mayoría de las rutas tienen el mismo problema”, sólo que los sectores previamente descriptos son los más afectados por esta problemática.
Amén de que la mayoría de las rutas que atraviesan la geografía provincial padecen el mismo problema, los puntos más riesgosos coinciden con la mayor ocurrencia de violentos accidentes de tránsito que en muchos casos terminan siendo mortales, provocando verdaderas tragedias familiares; y en otros se convierten en impresionantes milagros, cuando las víctimas resultan apenas heridas o increíblemente ilesas.
Además, se observa cierto fenómeno por el cual, no sólo las rutas señaladas deben ser consideradas como de riesgo extremo, sino también las tributarias o cercanas, ya que sobre sus banquinas también suele extenderse la peligrosidad de los animales que deambulan sin control, en muchos casos en tropillas numerosas.
Las peores
El comisario inspector José Barrera, del Cuerpo de Policía Montada de la provincia, especificó: “La 64 y la 9 son las rutas que más animales tienen. En la primera, la peor parte es la franja que se encuentra entre la ciudad capital de Santiago del Estero y el empalme con la ruta 24, que, girando hacia el sur, se dirige hacia Villa La Punta y Estación La Punta”. Este último sector, también está regado de animales de todo tipo, aunque abundan los vacunos, yeguarizos, porcinos y caprinos.
En cuanto a la nacional 9 o la Panamericana, una de las dos rutas más transitadas de la provincia, Barrera señaló como el punto álgido “cerca de Chañar Pozo hasta poco antes de la ciudad de Las Termas”. “Esas son las que estamos trabajando últimamente”, detalló en alusión a los operativos de secuestro de los ejemplares que los usuarios de las rutas denuncian o que ellos directamente detectan como sueltos y sin presencia humana que los controle o dirija.
Además, agregó que “en la ruta nacional 34, la zona crítica se ubica entre las localidades de Garza (en el departamento Sarmiento) y Herrera (departamento Avellaneda)”.
Igualmente, admitió que “la mayoría de las rutas tienen el mismo problema”, sólo que los sectores previamente descriptos son los más afectados por esta problemática.