Cuánto influyen los impuestos en los precios finales de los productos Cuánto influyen los impuestos en los precios finales de los productos
La carga impositiva que
presentan diferentes productos
que consumen los santiagueños
llega en algunos casos
a representar hasta la mitad
del monto que paga el consumidor
al momento de realizar
una compra, según un relevamiento
realizado esta semana
en diferentes sectores.
De esta forma, la presión
fiscal que contempla el impacto
de impuestos nacionales
como así también de los
estamentos más bajos, llegan
a un nivel que en ciertos productos
los vuelven más caros
que el valor que tienen artículos
similares en las grandes
capitales mundiales como el
caso de los combustibles por
ejemplo en el Reino Unido o
España.
Esta misma presión impositiva,
que influye en los
precios finales de los productos,
también motiva como
sucedió en esta semana
que cada vez más consumidores
se vuelquen a la compra
en países vecinos e incluso,
accedan a valores más bajos
a través de la compra vía
internet.
El pan
“La presión impositiva
en el caso del pan es variable
porque se toma en base a la
producción, pero si es sociedad
por ejemplo tienes un
30% de ganancias, un 3,5%
de ingresos brutos y una carga
laboral en aportes y contribuciones
de 53% por empleado”,
señaló el secretario
del Centro de Panaderos local,
Carlos Juárez.
Puntualizó que “el IVA
no se lo considera porque se
compensa con crédito y débito.
Pero de impuestos solamente
es casi un 60% sobre
el precio del pan y sumando
el resto, casi un 80%. El precio
del pan oscila en las panaderías
registradas y que cumplen
con todo lo que exige
la ley entre los $28 a $32, lo
cual significa que en esos valores,
entre $22 y $25 corresponden
a la carga tributaria
que tiene la actividad”.
Vehículos
En el caso de los vehículos,
una buena parte del precio
final va con destino a la
recaudación nacional. La alícuota
del impuesto más importante,
el IVA, depende si
se trata de un vehículo utilitario
o un auto y, a su vez, si es
nacional o importado.
“Si es un utilitario o un auto,
la carga impositiva es distinta
en la alícuota del IVA.
En utilitarios es un 10,5% por
ejemplo en camionetas o pick
ups.
Pero si es un auto, el IVA
es el 21%”, sostuvo el CPN
Miguel Assef de Senna Automotores.
A esta carga impositiva se
le puede agregar, además, los
aranceles de importación en
el caso que sean vehículos extra
Mercosur. En esos casos
la alícuota adicional es de un
20% aproximadamente, con
lo cual llevan casi un 50% de
impuestos.
Por otra parte, hay determinados
vehículos de alta
gama que llevan también
un impuesto interno y ahí la
alícuota también varía. La
presión fiscal puede llegar
al 50% dependiendo si son
Mercosur o extra Mercosur.
También los vehículos diesel
pagan un arancel.
Hay que
destacar que los impuestos
son comunes a todo el mercado
automotor.
Para graficar el peso de
la cuestión impositiva en el
precio final de un vehículo,
hay que tener en cuenta que
del valor final de $550 mil
por ejemplo de una pick up
HiLux doble cabina entrada
de gama, hay $52.262 de impuesto
al valor agregado y el
precio neto de la unidad es de
$497.137
En el caso de un Corolla
por ejemplo, por el que
se paga 21% de IVA, la incidencia
de la carga impositiva
en este vehículo que ronda
los $380.000, es de $65.950
que paga el consumidor sobre
el valor neto de la unidad
de unos $314.000.
Hay que tener en cuenta
que luego también se paga
el flete y el costo del patentamiento
de la unidad, en ambos
casos.
Un dato a tener en cuenta
es que en otros países la alícuota
que se cobra es más barata
y puede oscilar entre un
7% a un 3%.
Combustibles
En el caso de los combustibles,
la incidencia de los impuestos
también es elevada.
Aunque son diferentes en la
nafta y el gasoil, en ambos representa
entre 38 y 42% según
el combustible.
Uno de esos gravámenes
es el Impuesto de Transferencia
a los Combustibles sobre
el precio final de la nafta
y el gasoil.
El ITC representa
un 24% del valor al que se
expende la nafta súper en las
estaciones de servicio y 25%
en la “premium”. Cada aumento
de los importes en los
surtidores se refleja en mayor
recaudación por este tributo.
Pero además, en la nafta,
el 13% del precio está explicado
en el IVA, mientras que el
Fondo Hídrico representa un
2% del importe en los surtidores.
A eso hay que agregarle
los Ingresos Brutos que cobran
los provincias, que promedian
el 3%. La carga tributaria
sobre este combustible
es del 42%.
En el caso del gasoil, los
tributos conforman entre
un 36% y 37% del precio final.
En el diesel, el ITC posee
una menor incidencia: es
solo el 8%. El IVA talla en un
14% del valor de ese combustible
en las estaciones, mientras
que un impuesto específico
para el gasoil se queda
con un 12% de lo que pagan
los consumidores. Ingresos
Brutos, al igual que en naftas,
es un 3%.
Llevado a dólares, el litro
de nafta súper en la Argentina
tras el último cambio
se ubica en U$S1,31.
En
Chile, con una carga impositiva
similar, está a US$ 1,17.
En Brasil, con 39% de tributación,
también se ubica en
US$ 1,17.
En cambio, en Paraguay,
los impuestos son del
13% y eso hace que el importe
a los consumidores descienda
a US$ 1,02, pese a que se
trata de un país importador.
Golosinas
Juan Carlos es el gerente
de una distribuidora mayorista
de golosinas.
Al ser
consultado sobre la presión
tributaria que reciben tanto
caramelos como galletas
que se venden al público,
sostuvo que “para formar
el precio al que se va
a vender hay que tener en
cuenta que de arranque está
el IVA de 21% y por fuera
de eso hay otro 12 a 13% de
costo que se agrega por impuestos
provinciales y tasas
municipales”.
De esta forma por ejemplo
“sobre el precio de $10 de
un paquete de galletas tienes
un 21% de IVA más otro 3%
de ingresos brutos, más otro
1,2% si pagas con cheque y
otro 3% de retención que lo
puedes deducir si sos un gran
contribuyente”. Así, entre
$2,50 a $3 del paquete de galletas
son impuestos.
En el caso de un caramelo
de $1 cabe el mismo análisis.
Leche, yerba y azúcar
“En el precio de los alimentos
no solo los impuestos
sino también las cargas
sociales son importantes”,
señaló Andrónico Suárez del
Centro de Comercio e Industria
de La Banda.
Agregó que “en cargas
sociales cada $10 mil de
sueldo son $4.300 de carga
social, un 43% en cada empleado
con todos los aportes,
jubilación, fondo gremial,
todo lo que dice la ley.
Pero en lo que hace a la presión
tributaria está en 21%,
a lo que hay que agregar un
3% de ingresos brutos más
un 4% de Santa Fe o Córdoba
de donde provenga, más
la tasa municipal, ganancias
que es un 33% todo sobre
el precio y solo hablando de
impuestos, sin mencionar
otros costos como el flete y
los servicios”, señaló.
De esta forma indicó que
en un litro de leche fluída que
cuesta entre $18 a $20, en
impuestos solamente se paga
entre $5,40 a $6.
Señaló que en el caso de
los lácteos hay también una
fuerte incidencia del costo
del flete.
“En algunos casos
tienen una incidencia del
12% porque se trata de un camión
refrigerado que trae solo
esos productos y no puede
compensar el regreso a fábrica
con la carga de otro tipo de
mercaderías como sí sucede
con los otros transportes lo
que abarata el costo en esos
casos”.
Agregó que para el caso
del azúcar, la incidencia de
la estructura impositiva es similar
pero con un flete más
barato.
Para el caso de la yerba
mate, “tiene al margen de estos
impuestos como el IVA e
ingresos brutos, un impuesto
especial del Fondo Yerbatero
que viene en la etiqueta de
origen del producto y se paga
aparte. Pero le cabe el 21% de
IVA y con la suma de todos
los impuestos debe estar la
carga tributaria entre el 35 al
40% del precio final”, señaló.
De esta forma, en el precio
de una yerba mate de kilogramo
que tiene un costo
de $60, lleva de carga impositiva
entre $18 a $24.
El fernet
Como en todos los casos
de las bebidas alcohólicas,
el fernet no escapa
al impuesto interno por el
cual su precio final se encarece.
Desde una distribuidor
local Marcela, propietaria
del negocio señaló
que “el precio del fernet
está compuesto por el 21%
de IVA, el 3% de percepción
y el 24% de impuestos
internos”.
De allí se desprende que
la suma de todos los impuestos
que se incluyen en
el precio de la bebida al ser
puesto en góndola, suman
un 49% mientras que en el
resto va implícito el valor del
producto, el flete, etc.
En este caso, una botella
de 750 cm3 que tiene un
costo aproximado a los $100,
de allí unos $50 son impuestos
y el resto el precio del
producto.l