Autoridades tailandesas quieren convertir la cueva del rescate de los chicos en un atractivo turístico

A tan solo tres días desde que terminó el angustioso rescate de doce menores y su entrenador de la cueva de Tham Luang, donde permanecieron atrapados dos semanas, en Tailandia ya se habla de los beneficios que puede generar este suceso que ha mantenido en vilo a los tailandeses y a gran parte del resto del mundo.

Las autoridades de este país del sudeste asiático avanzaron ayer su intención de aprovechar el impacto internacional que ha tenido la arriesgada evacuación de los doce niños y su instructor para convertir la cueva de Tham Luang en uno de los principales reclamos turísticos del país. Y a ello se suma el interés que ya han expresado dos productoras de Hollywood para llevar esta historia a la gran pantalla.

Anan Wongbenjarat, director general de Turismo, explicó que el Gobierno tailandés prevé promocionar la provincia de Chiang Rai, donde se halla la gruta de Tham Luang, cuarta mayor del país, con más de diez kilómetros de longitud, como un nuevo destino turístico del país. Una proyección que tiene como objetivo potenciar una región rica en parajes naturales, pero poco desarrollada económicamente, que hasta ahora basa su desarrollo en el flujo del contrabando fronterizo con Laos y Birmania.

"Esta área se convertirá en un museo viviente, para mostrar cómo se desarrolló la operación de rescate", dijo Narongsak Osatanakorn, exgobernador de la provincia de Chiang Rai y jefe de la misión de rescate, en una rueda de prensa.