Coronavirus: la segunda ola de contagios hizo crecer notablemente la demanda de barbijos

De la mano con la llegada de la segunda ola de contagios de coronavirus, y el constante crecimiento de personas infectadas, se incrementó notablemente la demanda de barbijos en farmacias y comercios de insumos sanitarios, mientras que se mantiene en las tiendas, mercerías y casas que ofrecen estos productos sin comprobada eficacia.

Según una recorrida realizada por EL LIBERAL en farmacias y casas especializadas, se pudo comprobar que hay una mayor demanda de los barbijos que cuentan con la aprobación de organismos sanitarios nacionales e internacionales.

“Ha crecido mucho la demanda en las últimas semanas, especialmente de los barbijos del tipo KN95 y los Atom Protect N95, que incluso tienen nuevos modelos con filtros”, indicó el vendedor de una ortopedia ubicada en el centro de la ciudad.

Según empleadas del lugar, evidentemente “la gente está tomando mayor conciencia del cuidado que debe tener”, lo que incluso lo advierten cuando llega la gente al comercio.

“En la puerta hay un cartel que dice que no se permite la presencia de más de dos personas en el local, y antes teníamos que estar pidiéndole a la gente que esperara afuera cuando entraban, incluso algunos se enojaban. Ahora si ven a dos personas en el local, no ingresan y esperan guardando la distancia física”, dijeron.

Para niños

Indicaron que también de la marca producida por el Conicet, los Atom Protect, hay para chicos, que también son muy solicitados, “desde que comenzaron las clases presenciales”.

En tres farmacias céntricas consultadas confirmaron que hay una mayor demanda de barbijos, y en la mayoría sólo venden los del tipo descartables no quirúrgicos, que son de los más económicos.

“Buscan mucho los barbijos y llevan varios porque no son de los más caros, y la gente los usa durante todo un día”, coincidieron.

Donde el nivel de ventas se mantiene en los mismos parámetros, incluso en algunos lugares disminuyó, es en mercerías y tiendas, en los que se venden barbijos con logos de equipos de fútbol o de telas especiales que usan las damas.

“No se ha visto un gran aumento en la venta en este tiempo. Pasa que mucha gente también vende en sus casas”, arriesgaron.

Los precios dependen de la calidad del producto 

Los precios dependen de la calidad del producto

En cuanto a los precios de los barbijos, tienen que ver con la calidad del producto y la seguridad que brindan. Los hay desde los 50 o 60 pesos, hasta los 950, dependiendo del local y de la marca.

Los de mayor precio son los Atom Protect, que tienen la ventaja además de haber sido producidos por el Conicet, de que se los puede usar hasta 8 días sin lavarlos y soportan hasta 15 lavadas, y su precio va desde los 700 a los 950 pesos.

El NK95 cuesta 250 pesos por unidad, y tienen una rebaja si se compra el pack de cinco barbijos. Son lavables y vienen con filtros que facilita la respiración.

En farmacias se venden los descartables de entre 50 y 60 pesos, mientras que en mercerías y tiendas, se consiguen a un precio que va de los 100 a los 200 pesos.

Una publicación especializada asegura que usar dos mascarillas faciales duplicaría la protección contra el Covid 

El uso de dos máscaras faciales bien ajustadas podría duplicar la efectividad de filtrar partículas del tamaño del Sars-CoV-2, evitando que lleguen a la nariz y la boca del usuario y causen Covid-19, según una investigación publicada en la revista Jama Internal Medicine.

Según la publicación, la razón de una mayor protección no es tanto la adición de capas de tela, sino la eliminación de cualquier espacio o áreas de ajuste inadecuado.

“Las mascarillas para procedimientos médicos están diseñadas para tener un potencial de filtración muy bueno según su material, pero la forma en que se ajustan a nuestras caras no es perfecta”, sostuvo Emily Sickbert-Bennett, profesora asociada de enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte y autora principal de la investigación, en un comunicado.

Los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos actualizaron en febrero pasado sus recomendaciones sanitarias referidas al uso de barbijos e indicaron que el uso de mascarillas quirúrgicas ajustadas, o poner una de tela por sobre una quirúrgica, aumenta de manera significativa la protección contra el virus, tanto para quien las usa como a terceros.

Si bien se sabe que las máscaras reducen las gotas respiratorias y los aerosoles exhalados por los usuarios infectados y protegen al usuario no infectado, su eficacia varía ampliamente debido a las fugas de aire alrededor de los bordes de la máscara.

“El buen funcionamiento de una mascarilla depende de dos cosas: la filtración y el ajuste”, explicó Linsey Marr, profesora de Ingeniería civil y ambiental en Virginia Tech, que estudia la transmisión de enfermedades por el aire pero no participó del estudio.

“La buena filtración elimina tantas partículas como es posible, y un buen ajuste significa que no hay fugas alrededor por los lados de tu mascarilla, donde el aire -y los virus- pueden colarse. Las mascarillas quirúrgicas están hechas de un material que filtra bien, pero tienden a ser demasiado sueltas, por lo que si añades una de tela por encima sujetas los bordes y reduces las filtraciones”, señaló Marr, añadiendo que hasta un pequeño agujero puede reducir la eficacia en un 50%.