Sergio Rubín: "Un Papa peronista me parece un poco mucho" Sergio Rubín: "Un Papa peronista me parece un poco mucho"
La vida de Rubín, como la de Bergoglio, cambió radicalmente desde el preciso momento en que el prelado argentino fue ungido Papa en el cónclave realizado la semana pasada en el Vaticano. Todos quieren la palabra de Sergio, quien dedicó gran parte de su vida periodística a cubrir temas religiosos.
Desde la CNN hasta el New York Times y la BBC quieren entrevistarlo para profundizar en la historia del argentino que conquistó el corazón del mundo. EL LIBERAL lo encontró ayer, a la salida de la sede del Vaticano. Amablemente, accedió a una entrevista exclusiva
¿El Jesuita es un libro esclarecedor sobre quién es Su Santidad Francesco?
Sí, efectivamente. En realidad, a este libro lo hicimos nosotros (se refiere a la coautora, Francesca Ambrogetti) cuando él tuvo una gran performance en la última elección donde se consagró a Benedicto XVI. En ese cónclave, el entonces cardenal Bergoglio había alcanzado 40 votos. Nunca antes, un latinoamericano, había tenido tanta cantidad de votos. Además, conociendo su personalidad interesante, con una colega ítalo-argenina, Francesca Ambrogetti, dijimos que debíamos escribir un libro contando quién es este personaje tan grande e interesante. Lo fuimos a ver para ver de entablar charlas interesantes para conocer sus pensamientos, sus anécdotas, su vda.
Si se tiene en cuenta que es de perfil bajo, ¿cómo tomó la propuesta que le realizaron?
No quería saber nada. Después aceptó y, a partir de entonces, tuvimos charlas y encuentros que terminó siendo algo tan lindo como es El Jesuita, conversaciones con el cardenal Jorge Mario Bergoglio. Recuerdo cuando Francesca me dijo: “Sergio, deberíamos hacer un libro sobre Bergoglio, tuvo 40 votos y nunca antes un latino había sacado esa cantidad de votos”. Yo le había dicho: “Nos va a sacar corriendo, a Bergoglio no le gustan esas cosas”. Si bien, en un principio no quería, finalmente pudimos hacerlo y con Bergoglio como protagonista.
Más allá del religioso, ¿qué es lo que usted descubrió en el ser humano?
Descubrí a una persona de una gran humanidad, de una gran cercanía, de una gran sencillez, de una gran escucha y muy delicado en todos los detalles y en la relación con los demás. Realmente, fue muy reconfortante estar con él. Cuando en la plaza anunciaron que Bergoglio era el nuevo Papa me sorprendí y me emocioné. A partir de allí, estoy sobrepasado, enloquecido, supongo que Francesca también, pero yo aquí en el Vaticano. Es un hombre austero y humilde. En la habitación, donde dormía en Buenos Aires, tenía una simple cama de madera, un crucifijo de sus abuelos Rosa y Juan y una estufa eléctrica.
¿ Con Franceso es una garantía de reinará también el ecumenismo?
Por supuesto. él ha demostrado la muy buena relación con todo el mundo cristiano; con el judaísmo, en la Argentina ha tenido una relación muy intensa. Aquí, en el Vaticano, la primera tarea que tuvo fue dirigirle una carta al Gran Rabino de Roma. En Buenos Aires ha tenido una muy buena relación con el Islam. Ha visitado, varias veces, centros islámicos. Se va a avanzar mucho en el diálogo ecuménico y en el diálogo intereligioso.
Al ser consagrado como Papa, pidió al pueblo que lo bendiga; después habló de una iglesia que trabaje para los pobres y hoy (por ayer), en su homilía, se refirió a la necesidad de defender la vida y a deponer del “odio, la envidia y la soberbia porque ensucian la vida…”
Todas son cuestiones fundamentales a las que yo agregaría otras más: en el Angelus, habló de la misericordia, del perdón. Son aportes muy lindos, muy interesantes, muy profundos y que le llega de cerca a la gente. El tema de la pobreza, del perdón son temas muy importantes, tocantes y relevantes para la gente. Me parece que vamos a tener que prepararnos para más mensajes, para más actitudes de este Papa que está levantando un interés y está cayendo tan bien en la gente.
¿ Los afiches de Papa peronista, cómo lo ve?
Que el haya tenido una cercanía o simpatía con algunos aspectos de la doctrina peronista que, además, siempre se ha dicho que ha tomado la Doctrina Social de la Iglesia y ha sido un movimiento básicamente cristiano, me parece lógico. Pero, un Papa peronista me parece un poco mucho.
¿Cómo conoció a Su Santidad?
Fue a principios de los años 90 cuando iba al arzobispado a grabar entrevistas con el cardenal Antonio Quarracino para un programa de televisión que conducía. Lo veía pasar, tenía un perfil tan tan bajo que no se acercaba, yo lo veía a los lejos, pero a medida que fue ascendiendo en la pirámide eclesiástica nos fuimos conociendo más. Que lo hayan elegido a él como Papa me hizo sentir paz. Uno ha dedicado una vida a este tema, son más de 36 años, yo empecé muy chico a cubrir religión, que es una cosa muy grata en un sentido, pero en el otro es ingrata, porque no es un gran tema para un diario o para un medio de comunicación. Yo hago religión y es como que me toca bailar con la más fea. l
