Caso Móttola: La versión del expolicía detenido y acusado de ser un sicario

En la causa por el asesinato del mecánico santiagueño Eduardo Enrique Móttola, ocurrido el 6 de agosto de 2018 en su taller de calle Pedro León Gallo, hay tres detenidos acusados de tener participación directa en el hecho.

Juan Pablo Fernández, un ex policía federal acusado de ser el sicario que ejecutó a Móttola por encargo de Yésica Paola Díaz, la segunda detenida, una peluquera con la que la víctima había mantenido una relación. El tercero es Damián Silva que según la investigación, le habría entregado 118 mil pesos a la mujer para pagar por el asesinato. La hipótesis de la fiscalía es que el móvil del crimen se concretó luego de que Móttola, que había tenido una relación con Yésica, reclamara la paternidad de la hija que había nacido producto de ese vínculo.

La versión de Fernández

El expolicía Fernández sostiene que su causa "fue armada" y se basa en la existencia de un audio en la que la por entonces fiscal de la investigación Aída Farrán Serlé señala que él es inocente y que no hay pruebas para que esté detenido. 

Para Fernández lo de la exfiscal es "la confesión" de que él no tuvo nada que ver con la muerte del mecánico santiagueño.

Por su parte, Ángela María Marín Cruz, esposa del detenido Juan Pablo Fernández, en declaraciones a la prensa contó que Fernández era policía de la Federal, era "muy trabajador siempre haciendo adicionales, buscando algo para revender o intentando poner algún negocio. En 2017 sufrió un accidente en moto y en 2018 empezó a ver qué negocio hacer". 

Instaló una peluquería y luego abrió la academia y barbería. Por ese rubro, se relacionó con gente en Santiago del Estero.

"El tiene 19 años de policía en la Federal, yo lo conocí hace 13 años. Me dijo que quería ponerse un negocio aparte de su trabajo, que le gustaba la idea de tener una barbería y así empezó con una barbería pequeña. Como le fue bien, quiso abrir una academia. Lo acompañé también en eso", dijo Ángela en declaraciones a la prensa.

El detenido y todo su entorno niegan toda participación en el homicidio y dieron a conocer su versión de lo sucedido. "Es muy difícil, él está lejos y no hizo nada. Él no tiene nada que ver", afirmó Ángela. Relató que Fernández había venido a Santiago del Estero a dar cursos de peluquería luego de que una mujer lo contactara por Facebook.

En uno de esos viajes conoció Yésica Díaz, acordaron regresar a dar cursos y le había dejado mercadería en consignación para vender, pero como más tarde no se la había pagado, él le reclamaba dinero.

Para la Justicia, de esas comunicaciones surgió la planificación del crimen. Sin embargo, Ángela sostiene otra postura: "Ese día (por el 6 de agosto) viajó a pagar la seña en un salón para volver a dar los cursos porque le había ido muy bien. Fue y vino en el mismo día porque al día siguiente era el cumpleaños de su hija mayor".

Los investigadores apuntan contra él porque tomó la ruta 9, diferente a la que había usado para llegar. "Tomó esa ruta porque tenía que pasar por Córdoba por una peluquería" para dejarles insumos "pero como no había nadie, entonces volvió a Buenos Aires", aclaró Ángela.

Asimismo dio a conocer una carta en la que Yésica Paola Díaz le pide perdón por haber sido involucrado en la causa y en la que además asegura que no hay ninguna razón para mantenerlo detenido.

Por todo ello, afirma junto con su marido y todo su entorno que existió "un armado" de la causa en contra de Fernández y que el audio de la ex fiscal lo confirma porque allí dice claramente que no hay pruebas que lo incriminen. El 19 de marzo está previsto el inicio de las audiencias del juicio oral.