Fue apresado en el 2023. Ahora, cesó la preventiva, pero tiene penado acercarse a las víctimas. Los cargos de la fiscal y el "despegue" de su defensa.
Libre, 4 meses después de aterrar a su ex e hijo con golpes y amenazas Libre, 4 meses después de aterrar a su ex e hijo con golpes y amenazas
La jueza de Control y Garantías de la ciudad de Añatuya, General Taboada, Gladys Liliana Lami, dio luz verde ayer a la revisión de preventiva para un sujeto del departamento Avellaneda, excluido y bajo duras reglas de conducta, cuatro meses después de agredir a su esposa e hijo de 8 años.
En audiencia, la magistrada hizo lugar al requerimiento interpuesto por la defensa, a cargo de Gabriel Toloza (foto), en representación de Brahian Corbalán, 28, domiciliado hasta ahora en Campo Alegre, Avellaneda.
La fiscal Alejandra Sobrero acusa a Corbalán de golpear y humillar a su entonces pareja, ya que le había adelantado su deseo de disolver el vínculo en común.
Según el proceso que delinea Sobrero, el 12 de noviembre la esposa acudió a la Departamental 18 y denunció a Corbalán por amenazarla de que si osaba separarse, "vas a terminar en el cementerio, hdp", afirmó la mujer.
Detenido el progenitor, su hijo de 8 años le dio otro empujoncito, al acusarlo de golpearlo con palos y cintos. Es más, acotó, en Cámara Gesell, que cuando una hermanita de 2 años lloraba, Corbalán los reprendía y mandaba a la cama "sin comer".
La mujer no fue menos. Al declarar, manifestó que era común que la golpease y que mantuviera encerrada, porque en la casa "se hacía siempre lo que él ordenaba". Ahondó que su pareja amenazaba al hijo de 8 años con mandarlo con un vecino, apodado "Chivo", para ser "avivado".
El contragolpe
Dictada la preventiva por cuatro meses en diciembre, Toloza arribó ayer a audiencia, resuelto en hacer despegar a Corbalán, sin medir o ahorrar concesiones. Tras un intenso debate, la magistrada (foto) hizo lugar a la libertad de Corbalán, pero lo supeditó a inmediatos cambios de domicilio. La ex esposa e hijo se fueron a vivir a un familiar lejano y, por su parte, el imputado fijó ayer residencia en casa de una abuela.
Tiene penado acercarse a su ex, pero también se le clarificó que no debe olvidar sus obligaciones en la manutención de sus hijos, trámite a ser cumplido con la intervención de un familiar y amigo en común.
