"Es un momento que nos puede servir para acompañar a nuestros hijos en sus actividades recreativas, propiciando los juegos al aire libre lejos de las pantallas y la tecnología", sostiene el Dr. Ángel Muratore.
Las vacaciones de mitad de año pueden aprovecharse para muchos factores positivos Las vacaciones de mitad de año pueden aprovecharse para muchos factores positivos
Luego de trascurrida la primera etapa del periodo escolar y laboral, llegaron las tan ansiadas vacaciones de invierno, momento propicio para tomarnos una pausa, cambiar de aire y hábitos, descansar y prepararse para la segunda mitad del año. En este contexto, los especialistas remarcan la necesidad de ocupar este tiempo en actividades productivas, que lejos de "recargar" a los niños, sirvan para su bienestar emocional y físico.
Las mismas no solo se limitan al entretenimiento (aunque deberían ser mayoritariamente) sino a los controles de salud que podrían realizarse aprovechando el tiempo libre.
También te puede interesar:
El Dr. Ángel Muratore, médico pediatra, docente de la facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Santiago del Estero instó a los padres a "optimizar este tiempo", acompañando a los chicos en sus vacaciones, la mayor parte del día posible.
"Es un momento que nos puede servir para acompañar a nuestros hijos en sus actividades recreativas, propiciando los juegos al aire libre lejos de las pantallas y la tecnología. Las vacaciones de mitad de año pueden aprovecharse para realizar controles médicos a nuestros pequeños, esos que se realizan "aún estando sanos" para evaluar crecimiento y desarrollo, cobertura inmunitaria (Carnet de vacunas), estado nutricional y otros aspectos de importancia que muchas veces dejamos de lado mientras nuestros niños asisten a la escuela", advierte el Dr. Muratore.
Es importante también el tema del manejo de los horarios y los hábitos saludables, los cuales deben ser controlados permanentemente, independientemente de que si es tiempo de vacaciones o no.
"Hay que evitar el cambio de hábitos como ser el acostarse o levantarse tarde, el exceso de pantallas, el comer a deshora, sobre todo dejando de lado el desayuno. Si el niño práctica algún deporte, no interrumpirlo. Si los clubes también entraron en receso, tratar de continuar con alguna rutina deportiva, evitando el sedentarismo", expresó.
Se impulsan las actividades en familia, al aire libre
El pediatra recomienda estimular las actividades en casa, como manualidades, lecturas, juegos de mesa, cocina simple y películas familiares.
"También es válido visitar museos, teatros o centros culturales (ferias artesanales) en familia. Estos suelen ser un muy buen plan, evitando aglomeraciones y lugares cerrados ya que estamos en época de frío y gripe", aconsejó.
Y en el caso de la posibilidad de vacacionar en otro lado, precisó: "Si viajamos, transporte seguro, con todos los requerimientos viales. Lo importante siempre es llegar, aunque nos demoremos un poco".
Es fundamental la presencia de los padres
La compañía de los padres en tiempo de vacaciones es más importante de lo que pareciera. Contar con ellos genera una gran satisfacción en los niños.
"Es nocivo no contar con los padres justamente cuando ellos tienen la posibilidad de compartir; así que éstos deben tratar de fabricarse 'artesanalmente' el tiempo para estar de alguna forma con los hijos", indican los especialistas.
"No hablamos de grandes cantidades de tiempo; hablo de una porción, en donde nos encontremos en la mirada, en una sonrisa y donde nos encontremos en la motivación de hacer algo en común, correr, caminar, saltar, practicar cualquier deporte, pasear por una plaza, una compra en el supermercado, compartir lo mínimo", aseveraron.
