El acusado era la pareja de la madre de la niña y se dedicó a distintos oficios en esa localidad.
Santiagueño condenado por abusar de su hijastra durante cuatro años Santiagueño condenado por abusar de su hijastra durante cuatro años
La Cámara del Crimen de la ciudad de Villa María, Córdoba, dictó en las últimas horas una sentencia que generó profunda conmoción en la comunidad local. Un hombre de 33 años, oriundo de Santiago del Estero, fue condenado a cuatro años de prisión efectiva por el delito de abuso sexual reiterado y agravado por el vínculo conviviente, cometido contra su hijastra, una menor de 13 años, a lo largo de siete años de convivencia.
Un caso que estremeció
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La investigación reveló que los abusos comenzaron cuando la víctima era muy pequeña y se extendieron de manera sostenida en el tiempo, en el marco de la convivencia familiar. El acusado era la pareja de la madre de la niña y, durante los siete años en que residió en Villa María, se dedicó a distintos oficios, entre ellos carnicero, verdulero y pintor.
La relación de poder y cercanía que implica la figura del padrastro convirtió este caso en un ejemplo de los abusos que se desarrollan en entornos domésticos, donde la intimidad del hogar suele volverse un espacio de silencio y sometimiento para las víctimas.
Durante el juicio, el hombre optó por abstenerse de declarar, evitando dar su versión de los hechos ante el tribunal. Sin embargo, las pruebas reunidas y el testimonio de la menor resultaron suficientes para que el cuerpo judicial lo encontrara responsable de los cargos.
Fallo ejemplar
La defensa técnica del imputado estuvo a cargo de la defensoría pública, mientras que la Cámara del Crimen valoró en todo momento la necesidad de preservar la identidad de la menor. El caso generó un fuerte impacto en Villa María, provincia de Córdoba, tanto por la duración de los abusos como por el vínculo que mantenía el agresor con la víctima.
Este proceso judicial se suma a la larga lista de situaciones que evidencian la vulnerabilidad de los menores frente a entornos intrafamiliares violentos.
El fallo, además de imponer una pena concreta, reabre el debate sobre la necesidad de reforzar las redes de contención y prevención en los hogares, escuelas y organismos estatales. El santiagueño condenado será sometido a pericias psicológicas mientras permanezca en la cárcel.
