Buscan a un acosador tucumano que destruyó la tobillera electrónica en Santiago y desapareció

Un peligroso acosador tucumano, que había sido enviado a Santiago del Estero por la Justicia de Tucumán para alejarlo de una joven mujer a la que hostigaba permanentemente, acaba de desaparecer de su lugar de residencia dejando destruida la tobillera electrónica que le había sido impuesta.

La Justicia ya libró orden de detención. El sujeto había estado 9 meses en Santiago y era monitoreado por un pastor. Se trata de Federico Adrián Punturo, acusado de hostigar durante más de una década a una joven de Tafí Viejo, a quien ahora le pusieron custodia.

El caso se hizo público en noviembre de 2024, cuando la víctima brindó un testimonio contundente a los medios: "Hace 12 años que vengo haciendo denuncias porque una persona que no conocía aparece en mi domicilio alterando la paz de mi entorno. Nada me garantiza que de acá a dos meses vaya a estar viva".

Punturo fue procesado por desobedecer una orden de restricción dictada por el Juzgado Civil V de Familia. Inicialmente, la jueza Isabel Méndez dispuso que fuera evaluado en el Hospital Obarrio, con la alternativa de arresto domiciliario por 15 días. Sin embargo, tras apelaciones de la fiscal Adriana Reinoso Cuello y el abogado de la víctima, Patricio Char, se dictó una prisión preventiva de 40 días, que luego fue reemplazada por un acuerdo de probation por 3 años, con condiciones estrictas.

Entre las reglas a cumplir se encontraban: debía residir en Santiago del Estero bajo supervisión de un pastor, prohibición de ingresar a Tucumán sin autorización judicial, uso obligatorio de pulsera de rastreo, tratamiento psicológico y abstinencia de drogas y alcohol, sumado a reparación económica a la víctima y tareas comunitarias semanales y asistencia a cursos de género.

Pero las alarmas se encendieron en Tucumán cuando las autoridades confirmaron que Punturo se arrancó la tobillera electrónica y que, antes de presentarse a la audiencia virtual para dar respuesta a este accionar, dijo que tenía problemas técnicos para conectarse y luego se fugó, informaron desde medios locales.

Frente a este hecho, la defensa de la víctima solicitó una orden de captura y reforzar su protección, ambas medidas autorizadas. En tanto, trascendió que las fuerzas policiales coordinaron tareas. El tucumano es buscado en ambas provincias, pero hasta el cierre todos los esfuerzos eran insuficientes porque a Punturo se lo  "tragó" la tierra.

Puntos centrales de la probation violados por Punturo

La probation permitía al imputado evitar el juicio oral, pero debía cumplir varias reglas: residencia obligatoria en Santiago del Estero, bajo supervisión de un pastor, control regular del Patronato de Internos y Liberados, prohibición de ingresar a Tucumán sin autorización judicial, uso permanente de pulsera electrónica de geolocalización, tratamiento psicológico y abstinencia de alcohol y drogas, pago de $300.000 como reparación económica a la víctima, tareas comunitarias semanales y asistencia obligatoria a cursos de perspectiva de género.

"Estamos ante un caso grave. El antecedente de Paola Tacacho es muy similar. Se deben tomar todas las medidas para garantizar la seguridad de la víctima", señaló el querellante, Patricio Char, haciendo referencia al emblemático caso de femicidio que conmovió a Tucumán y al país en 2020.

El juez aceptó el planteo y la Fiscalía apoyó la solicitud, por lo que se emitió formalmente la orden de detención. Desde su desaparición, su paradero es desconocido, mientras que la víctima permanece con custodia policial permanente en su domicilio por orden judicial. Ante la gravedad de la situación, Char, solicitó al juez, también reforzar la protección de la víctima y revisión de los mecanismos judiciales aplicados.