Russo no recibió el alta y su presencia en Florencio Varela está en duda

Miguel Ángel Russo permanece hospitalizado realizándose estudios médicos programados y todavía no recibió el alta para regresar a su casa. El entrenador de Boca ingresó al sanatorio el miércoles por la tarde y, a 48 horas del duelo frente a Defensa y Justicia por la décima fecha del Torneo Clausura, su presencia en Florencio Varela es una incógnita.

El martes había estado en la práctica, pero al día siguiente se ausentó en el entrenamiento vespertino en La Bombonera por los análisis ya previstos. En su lugar, la conducción del plantel quedó en manos de Claudio Úbeda y Juvenal Rodríguez. Aunque se esperaba que este jueves pudiera retornar a su domicilio, las horas pasaron y Russo sigue internado a la espera de la decisión de los médicos.

A principios de septiembre, el DT había estado una semana en la Clínica Fleni por una infección urinaria que complicó su delicado estado de salud. Aquella internación le impidió dirigir varias prácticas en este tercer ciclo en el club. Recién el 5 de septiembre recibió el alta, aunque la dirigencia decidió darle más días de reposo y su regreso se produjo recién el jueves siguiente, en la última práctica previa al viaje para enfrentar a Rosario Central. Tras aquel partido, que terminó 1-1, Russo expresó su malestar por los rumores sobre su estado: "Hubo muchos que dijeron tonterías. El que sabe sobre su salud es uno mismo", advirtió.

Mientras tanto, el plantel se entrenó esta mañana en el predio de Ezeiza bajo las órdenes de Úbeda y Rodríguez. Allí se confirmó una mala noticia: Carlos Palacios sufrió una distensión en el músculo pectíneo izquierdo y quedó descartado para visitar al Halcón.

La intención del cuerpo técnico era repetir el once que igualó 2-2 el domingo ante Central Córdoba, pero la lesión del chileno obligará a un cambio. Alan Velasco aparece como el principal candidato para ocupar su lugar, aunque otra alternativa es Williams Alarcón, si se opta por un esquema más defensivo.