El 12 de noviembre fue ejecutado un atraco "cocinado" por policías exonerados y otros en funciones. El botín nunca fue recuperado.
Cuenta regresiva al juicio para la "banda poliladron" que jaqueó a Servisur con $ 2.413.080 en 2019 Cuenta regresiva al juicio para la "banda poliladron" que jaqueó a Servisur con $ 2.413.080 en 2019
La Justicia se apresta a bajar el telón a la denominada "banda poliladron", sindicada de apoderarse de $ 2.413.080, tras montar un golpe basado en el uso de armas y hasta un simulacro por el estallido de una garrafa, el 12 de noviembre del 2019.
Los imputados son el exonerado policía Marcos Villalba; el también exonerado Bruno Rubín; los policías Luis Serrano y Marcelo Campos y en quinto lugar el técnico en celulares, Iván Díaz Páez, quienes dieron el gran atraco a plena luz del día.

Éstos habrían sorprendido a dos tesoreros de Servisur mientras viajaban en remís, desde la base de la firma en avenida Belgrano y Solís hacia el microcentro. Transportaban dos bolsos con $ 2.413.080 para depositar en diferentes cuentas bancarias y comprar combustible.
El epicentro
En Dorrego y 24 de Septiembre, varios sujetos (con rostros cubiertos) detuvieron al remís. Se apoderaron del dinero y abandonaron una EcoSport, junto con una garrafa. El temor emergente fue una explosión.
La banda logró salirse con la suya. Pudo ocultar el dinero (al parecer en el Bº Smata), pero fue captada al reunirse en una casa del Bº 8 de Abril. Ello permitió a la Fiscalía detener a una docena de sujetos, hasta centrarse el proceso en los actuales imputados, todos ya excarcelados.
Por fuera del proceso penal, trascendió que el dinero fue encomendado a novias de los cerebros y que hubo días en que el escondite era un horno de leña.
"Robo doblemente calificado agravado por el uso de arma de fuego en poblado y en banda" es la acusación de la fiscal Fernanda Vittar. La cita es en tribunales y con el juez Rodolfo Améstegui. ¿Motivo? oposición a la requisitoria fiscal, control, ofrecimiento y admisión de pruebas.
Lo sustancioso
En el juicio, la Fiscalía buscará develar quién fue el cerebro. Todo indica que era Villalba y un hermano. También, quién se llevó el dinero, porque jamás fue recuperado.
Tan audaz como desconcertante, el atraco a los empleados de Servisur fue delatado por sujetos originalmente contratados, luego descartados.
Los testigos confiaron a los fiscales que los candidatos fueron reclutados en un organismo policial. Casi todos los "apalabrados" eran expolicías. Dos semanas antes del gran golpe, dos imputados hicieron tareas de inteligencia en Servisur, en pos de conocer la rutina en cada viaje.
Finalmente, cuando el asalto fue consumado, los "descartados" enviaron al frente a sus patrones y posibilitaron a la Fiscalía cerrar el cerco a la banda, pero esposarlos recién después que ocultaron el botín.








