El hecho se produjo durante el último fin de semana, en el marco de controles sorpresivos y aleatorios impulsados por el Ministerio de Seguridad y Justicia en distintas dependencias policiales.
Escándalo en una comisaría: dos policías llegaron alcoholizados a cumplir servicio Escándalo en una comisaría: dos policías llegaron alcoholizados a cumplir servicio
Un grave episodio salió a la luz en la Comisaría Primera de San José de Metán, en la provincia de Salta, donde dos efectivos policiales dieron positivo en controles de alcoholemia al presentarse para iniciar su jornada laboral. El hecho se produjo durante el último fin de semana, en el marco de controles sorpresivos y aleatorios impulsados por el Ministerio de Seguridad y Justicia en distintas dependencias policiales.
Según informaron fuentes oficiales, los agentes —una oficial y un suboficial— fueron sometidos al test al ingresar a la comisaría durante la madrugada del sábado, alrededor de las 6.30. Ambos arrojaron resultados positivos, situación completamente incompatible con el servicio operativo que debían prestar. De inmediato, se les retiraron las armas reglamentarias y quedaron suspendidos de forma preventiva, mientras Asuntos Internos inició un sumario para definir las sanciones correspondientes.
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De acuerdo con lo publicado por Diario Info Salta, la irregularidad podría extenderse más allá del consumo de alcohol. Trascendió que, previo a presentarse a trabajar, los efectivos habrían participado de un asado en un quincho ubicado en el barrio Los Altos, propiedad del suboficial principal involucrado. Además, se investiga si un tercer policía habría formado parte del encuentro, aunque no se habría presentado a cumplir funciones debido a su presunto estado de ebriedad.
El lugar donde se realizó la reunión ya había sido objeto de cuestionamientos meses atrás. Dos meses antes, una vecina había dado aviso al Centro de Coordinación Operativa (CCO) tras observar la presencia de menores en una reunión nocturna. Aquel episodio no derivó en actuaciones administrativas, aunque fuentes internas señalaron que una de las mujeres involucradas —oriunda de El Galpón y con carpeta médica vigente— fue apartada de sus funciones tras confirmarse su asistencia al evento.
Lo ocurrido generó fuerte preocupación puertas adentro de la dependencia, en un contexto de sobrecarga operativa y tensión creciente, agravada por un grave problema estructural: el hacinamiento extremo de personas detenidas, una situación que viene siendo advertida por medios locales.
