Por Mariano Obarrio. Periodista.
El voto volátil y el derrumbe silencioso de todos y la Argentina que quiere otra cosa El voto volátil y el derrumbe silencioso de todos y la Argentina que quiere otra cosa
Las elecciones legislativas de 2025 dejaron a la vista el derrumbe simultáneo del voto de Milei, del peronismo y del viejo Juntos por el Cambio, y la aparición de un actor cada vez más determinante: la abstención.
Las cifras comparadas con las presidenciales y el balotaje de 2023 exhiben:
También te puede interesar:
* más de 5 millones de electores que apoyaron a Milei no volvieron en 2025;
* casi 4 millones del peronismo tampoco;
* cerca de 5 millones de ex votantes de JxC quedaron huérfanos.
El sistema político perdió volumen por todos lados.
El verdadero vencedor de este turno electoral fue el desencanto.
*Milei: el retroceso más grande desde el balotaje
El Presidente había escalado hasta los 14,55 millones de votos en el balotaje de 2023, impulsado por el voto útil anti–kirchnerista.
En 2025, ya gobernando, descendió hasta 9,43 millones.
Perdió 5.116.700 votos respecto del balotaje, pese a sumar al PRO en la mayoría de los distritos grandes.
Aunque incorporó 1,4 millones de votantes de Juntos por el Cambio que lo habían apoyado en la segunda vuelta, la sangría fue mayor: 5,1 millones de ex votantes de JxC se perdieron en el camino.
La paradoja es evidente: el Presidente sumó aliados políticos, pero perdió electores reales.
Juntos por el Cambio: la fuerza que dejó de existir en las urnas
En 2023, con Patricia Bullrich, JxC había reunido 6,38 millones de votos.
En 2025, fragmentado en decenas de boletas provinciales, el espacio quedó reducido a retazos.
Si Milei captó apenas 1,4 millones de ese viejo caudal, entonces 4.976.153 votantes de JxC no acompañaron al Presidente ni regresaron a ninguna expresión competitiva del espacio.
Ese voto migró a la abstención, a fuerzas provinciales mínimas o a expresiones que no obtuvieron bancas. Fue, esencialmente, un voto desperdiciado. El voto INÚTIL.
El peronismo: una caída menos ruidosa, pero igual de profunda
Sergio Massa había logrado 9,85 millones de votos en octubre de 2023, que ascendieron a 11,59 millones en el balotaje.
Pero en 2025, la marca peronista cayó a 7,82 millones.
Eso implica:
* 2.029.065 votos menos comparando presidenciales 2023 vs. legislativas 2025.
* 3.774.293 menos si se compara con el balotaje.
Es decir: casi cuatro millones de votantes que eligieron a Massa para enfrentar a Milei no eligieron a nadie del peronismo para frenarlo en 2025.
Un dato que deja al descubierto la ruptura del contrato emocional entre el peronismo y parte de su base clásica.
Schiaretti y el "Cordobesismo" ampliado: muchos gobernadores, pocos votos
En 2023, Juan Schiaretti había logrado 1,8 millones de votos, casi sin aliados en otras provincias.
En 2025, "Provincias Unidas", con seis gobernadores (Córdoba y Schiaretti incluidos) y una estructura más amplia, obtuvo prácticamente lo mismo: 1,79 millones.
El resultado fue una decepción: más actores, mismo caudal, menos expectativa. Un voto fiel, pero sin capacidad de expandirse.
¿A dónde se fueron los votos?
La respuesta está fragmentada:
*Frente de Izquierda (FIT): creció de 722.061 a 904.434 votos, un aumento marginal en términos del sistema.
*Innovación Federal: una novedad de partidos provinciales que sumó 619.159 votos.
*"Otros" partidos dispersos: 2.634.060 votos, sin volumen para ganar bancas por la fragmentación.
La conclusión es clara: la mayoría de los votos que se perdieron no se redistribuyeron entre fuerzas alternativas competitivas.
La abstención: el verdadero partido ganador
El dato más impactante está fuera de las boletas.
*En 2023: votaron 27.623.920 personas (77%).
*En 2025: apenas 24.531.299 (67%).
Son 3.092.621 ciudadanos que dejaron de ir a votar, pese a que el padrón incluso creció en medio millón de electores.
Ese es el agujero negro del sistema político.
*No se fueron a Milei.
*No se fueron al peronismo.
*No se fueron a Schiaretti, a la izquierda ni a los provinciales.
Simplemente no fueron.
Conclusiones: el país que se desengancha de la política
* Los tres grandes perdieron a la vez: Milei (-5,1 M), peronismo (-3,7 M), JxC (-4,9 M). Nunca había ocurrido una sangría tan simultánea desde 1983.
* El voto útil de 2023 se evaporó: ni Milei retuvo su ola ni Massa pudo contener su barrera. Los dos picos del balotaje fueron un espejismo.
* La crisis de representación explotó en 2025: casi el 10% del padrón que votó en 2023 ya no votó en 2025.
*La oposición no supo capitalizar el malestar: los casi 5 millones de votos perdidos del ex JxC no generaron ninguna fuerza competitiva.
*El oficialismo suma sellos, pero no adhesión: Milei unió estructuras, pero perdió legitimidad electoral.
*La Argentina política se achicó: el sistema ya no logra contener ni expresar a su propia sociedad.
*En definitiva, el mensaje de 2025 no fue para Milei ni para el peronismo. Fue para todos: la gente no cree, no confía y, sobre todo, no participa.
*El voto que no fue a votar o que se dispersó en diversas fuerzas o votó sólo "en contra dé", por miedo al oponente, es hoy la mayor fuerza política de la Argentina.
*Falta una fuerza que expresé el sueño de una Argentina diferente y con una visión integradora y despojada de las grietas, un conjunto de ciudadanos multisectorial, plural, humanista, productivo y federal, que pueda sintetizar la sintetizar la amistad social, con el desarrollo productivo, el empleo y el proyecto de vida de todos.
