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Desde el 2 de octubre, la Justicia afectó a canes, gendarmes, policías de la División Homicidios y Delitos Complejos, del Grupo GER, División Trata de Personas, entre otros. Y nada. Allí radica una nebulosa que condena y libera, a la vez, a Navarro. Los fiscales intuyen que tiene relación con la desaparición, pero esa percepción "colisiona" con la ausencia de pruebas contundentes. Nadie pudo demostrar que Zárate hoy esté vivo o muerto. Ha sido allanado el campo de 50 hectáreas y otras por él arrendadas. Los resultados fueron "cero total". También se trabajó en criaderos de cerdos. Y tampoco pudo obtenerse nada. Ahora se indagará en otras propiedades.