Zárate: "Espero hacer las cosas bien y poder ayudar"

La confirmación de Mauro Zárate como refuerzo de Boca Juniors fue, hasta ahora, el cimbronazo más grande que recibió el mercado de pases de la Superliga.

La conflictiva y traumática salida que tuvo el delantero de Vélez Sársfield, donde pasó de ser ídolo a odiado por los hinchas y hasta le trajo al jugador peleas familiares y hasta amenazas de bomba en el colegio al que asisten sus hijos, no hizo más que otorgarle más condimentos a esta transferencia.

Así, a un día de viajar a Estados Unidos para realizar la pretemporada, Boca sumó su tercera incorporación para afrontar la triple competencia en el segundo semestre del año.

A última hora de la tarde del jueves, Mauro Zárate firmó su contrato en el complejo Pedro Pompilio y desde ayer tuvo su primera práctica bajo las órdenes del cuerpo técnico que encabeza Guillermo Barros Schelotto.

"Estoy con muchas ganas y con mucha expectativa. Espero hacer las cosas bien y poder ayudar para seguir ganando cosas. Al equipo lo vengo siguiendo y lo conozco. Espero poder ayudar desde mi lugar para seguir consiguiendo cosas", señaló en dialogo con el sitio oficial del "Xeneize".

Luego de recorrer las instalaciones del club y de pisar el césped de la Bombonera, el atacante agregó: "El hincha de Boca me conoce como jugador. La madurez siempre ayuda y mejoré muchas cosas. Antes, quizás por joven o poca experiencia, cometía errores. Son cosas que ahora uno no las repite".

En su extensa trayectoria por el fútbol argentino e internacional, Zárate convirtió 106 goles y dio 46 asistencias en 347 partidos oficiales. El atacante, según aseguró, se suma como una opción más para la delantera del conjunto de Guillermo. "Hay muchos jugadores en ofensiva, pero eso es mejor para el equipo. El técnico tiene más opciones para decidir lo mejor. Espero que podamos jugar todos y que aportemos para conseguir grandes cosas", concluyó.

Recibimiento

Ya en el complejo, sus compañeros le dieron la bienvenida. Carlitos Tevez se mostró contento como de costumbre y charlando con su amigo "Wanchope" ábila; Darío Benedetto, bien abrigado, hacía pases con Pablo Pérez; los juveniles trabajaban entre sí, y los arqueros, apartados del grupo. Y por ahí andaba Zárate, sin llamar la atención, en las cercanías del capitán Fernando Gago y Gino Peruzzi, quienes trataron de hacerlo sentir cómodo.