Preventiva para Bonahora en la causa por estafas múltiples con numerosos cheques truchos

Cual peligrosa bola de nieve, el escándalo por los cheques "voladores" ayer también se llevó puesto a un cordobés, acusado de perpetrar estafas en Quimilí y en la ciudad Capital.

Sobre Luciano Román Feith pesaba una orden de detención desde el 3 de diciembre de 2014.

Apareció en escena recién en el 2015, con la indagatoria, y ahora su nombre vuelve al tapete con una estafa con cheques "fuquis".

Según la investigación de la jueza Falco, estafó a Omar Pascual Git en Quimilí con la compra de un tractor y a Jorge Rolando Sayago, con maquinaria para la instalación de una carnicería, en Capital.

Acto II

Feith fue puesto a disposición de la fiscal Aída Farrán Serlé.

La funcionaria lo unió con los detenidos Costas, Bellido; su hija Milka S. Bonahora y Nico Bonahora.

Todos están acusados de pergeñar estafas en los 4 puntos cardinales, sin distinción de rubro.

Por ejemplo, Milka fue imputada en estafas a casa de repuestos de calle Rivadavia, una pinturería y hasta a un vendedor de equipos de música.

Resolución

Ayer también fue agitada la mañana para Milka y Nicolás Bonahora.

Temprano, la jueza de Control y Garantías, María Pía Danielsen, dictó la preventiva para Milka, a quien la Fiscalía considera la "jefa de una asociación ilícita".

El "mazazo" legal dejó perpleja a Milka y a su abogado, Lucas Vieyra Ortiz.

Luego, la magistrada concedió la excarcelación extraordinaria al hermano de Milka, Nicolás Eduardo Bonahora.

Las doctoras Luciana Jacobo y Victoria Ledesma, del equipo de Farrán Serlé, le enrostraron el delito "miembro de dicha asocicación ilícita", se supo.

La resolución dibujó sonrisas en el joven, más en su abogado Javier Leiva, quien presentó una batería de medidas, garantizando que su cliente, aún libre, se someterá a proceso.

Danielsen no se la hizo fácil. Antes, le fijó restricciones y "cero" acercamiento a los comerciantes denunciantes, damnificados, víctimas del "tendal" de estafados con los cheques.