Liberan detenidos por caso atentados

Dos de los catorce detenidos en el marco de la investigación por la explosión frente al mausoleo del coronel Ramón Falcón en el cementerio de la Recoleta y por el artefacto explosivo arrojado en la casa del juez Claudio Bonadio, fueron liberados ayer tras declarar ante la Justicia.

Uno de ellos es Graciela Franco, una mujer que vivía junto a sus cinco hijos en la vivienda de la calle Pavón 2345, del barrio porteño de San Cristóbal.

Franco declaró ante el juez federal Julián Ercolini que vivía en otro piso y en una habitación separada adonde fueron secuestrados elementos que sirven para la elaboración de artefactos explosivos caseros.

En tanto, el otro imputado que declaró ante Ercolini y luego fue liberado es el tío de Marcos Viola (26), el joven que arrojó el artefacto explosivo en el jardín del juez federal Claudio Bonadio.

El hombre, de apellido Gualtieri y 63 años, había sido detenido en la localidad bonaerense de Villa Bosch, pero tras un allanamiento en su vivienda no se encontró ningún elemento que lo vinculara con los atentados.

A su vez, diez de los imputados se negaron a declarar y continuarán presos.