El presidente de Filipinas "aplastara" a terroristas

MANILA. El presidente filipino, Rodrigo Duterte, visitó ayer la catedral y la localidad donde se produjo el doble atentado que dejó 20 muertos y más de 80 heridos y ordenó "aplastar" al grupo yihadista Abú Sayyaf.

El grupo del Estado Islámico ha reivindicado el atentado perpetrado contra la Catedral de Jolo, en Filipinas, pero las autoridades sospechan que podría haber sido obra de Abú Sayyaf.

Duterte prometió "aplastar" a los "impíos criminales" responsables del atentado.

Por boca de su vocero, Salvador Panelo, Duterte describió el incidente como un "acto de terrorismo" y un "atrevido desafío" contra la capacidad del Gobierno para controlar el sur del país, campo de actuación de grupos islamistas.

El gobernante visitó además a varios de los heridos, según varias fotografías publicadas por su asesor especial, Christopher Go.

El Ejército no descartó que Estado Islámico esté detrás del ataque, aunque señaló que las investigaciones preliminares apuntan a que se trató de un doble atentado con explosivos de fabricación artesanal.

"La sospecha inicial es que miembros de Abú Sayyaf están detrás del ataque, según las informaciones de las cámaras de seguridad", expresó el vocero del Ejército Edgard Arevalo.