Su segunda tumba en Brunoy Su segunda tumba en Brunoy
La familia de Balcarce se mudó
poco tiempo después de la muerte
de don José a Brunoy, un suburbio
parisino al sur de la ciudad luz. Allí,
en 1860 murió la mayor de sus hijas,
María Mercedes. Sus padres levantaron
una bóveda en el cementerio
de Brunoy y decidieron trasladar
los restos de San Martín desde
Boulogne Sur Mer, para que reposaran
junto a los de su nieta querida.
En 1880 los restos del Libertador
fueron trasladados a Buenos
Aires, cuando ya su hija Mercedes
yacía junto a él en Brunoy. En 1951,
la hija del Libertador, su yerno, que
había muerto en 1885 y su nieta
María Mercedes fueron trasladados
a Mendoza, donde reposan en
la Basílica San Francisco.
Durante
treinta años, la última nieta de San
Martín, Josefa, que se había casado
con un mexicano, Fernando Gutiérrez
Estrada, se dedicó al cuidado
de la bóveda familiar en Brunoy,
donde vivió hasta su muerte, en
1924. Fue condecorada por Francia
por su participación como coordinadora
de enfermeras en las batallas
de la Primera Guerra Mundial
libradas por el ejército francés en
los alrededores de París. Una fundación
llamada Gutierrez Estrada
– Balcarce, fundada por los esposos,
sigue trabajando en el ámbito
social en Brunoy. Los restos de
Gutiérrez Estrada y Josefa Balcarce
San Martín fueron llevados desde
la bóveda familiar de la que hablamos
hacia México.
Quedan todavía lugares a recorrer
donde la historia de San Martín
y la historia de los argentinos
han transcurrido. Seguiremos viajando
cada domingo para encontrarlos.