Asesinó a su madre adoptiva porque le negó dinero para comprar repuestos de la moto

La policía descubrió que la mujer que apareció flotando en el canal matriz en la localidad de La Guarida había sido agredida y arrojada al cauce por su hijo adoptivo, un joven de 25 años que confesó que la golpeó, tras una discusión.

La víctima, que en horas de la noche del martes había sido identificada por la policía a través del sistema biométrico, falleció ahogada según lo determinó la autopsia, al caer al agua empujada por el detenido.

¿Cómo se descubrió al asesiino? Mientras el cadáver de Palmira Atanasia Suárez -de 74 años- permanecía en la morgue del Centro de Salud Banda, personal de la División Homicidios y Delitos Complejos recibió una alerta de la Subcomisaría de Los Quiroga.

A esa dependencia había arribado un joven -identificado como Marcelo Fernando Paz- quien manifestó a los uniformados que estaba ‘preocupado’ porque su madre no aparecía.

Inmediatamente, los investigadores arribaron a esa dependencia y trasladaron al sujeto hasta la base de Homicidios, donde le tomaron declaración testimonial.

El joven dijo que su madre había salido de la casa sin que él la viera. Su relato no conformó a los expertos, que ante el interrogatorio incurrió en contradicciones.

Al verse acorralado por los efectivos, terminó confesando que él la había golpeado tras una discusión y que la empujó hacia el canal cuando ambos se encontraban en una garita de Los Quiroga.

El sujeto manifestó que caminaba con destino a una entidad bancaria en La Banda para que su madre extrajera dinero. Mientras aguardaban un colectivo, el sujeto le pidió a la víctima que cuando obtenga el dinero le diera una parte para que comprara repuestos para su motocicleta.

La negativa de la mujer habría generado una discusión entre ambos. Ante la firme postura de Suárez, el acusado, ofuscado, le propinó un golpe de puño en un ojo, tras ello la mujer trastabilló y él la empujó al agua.

Según confesó el supuesto homicida, solo le dio un golpe y tras arrojarla se retiró a toda prisa del lugar, y se trasladó a una entidad bancaria. Allí intentó extraer el dinero, pero al no concretar su propósito, se trasladó hasta la terminal bandeña, donde tomó un colectivo y regresó a Los Quiroga.

Permaneció en la casa, donde residía con la víctima, hasta la tarde-noche que se presentó en sede policial.

Inmediatamente los investigadores informaron de la situación la Dra. María del Pilar Gallo -fiscal de la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar- quien arribó a la casa de la víctima y tomó las riendas de la investigación.

Hasta la madrugada de ayer, la fiscal y los policías realizaron allanamientos en la casa y secuestraron el celular del detenido, de uno de sus hermanos y otros elementos.

Con la luz del día, y ya con la participación de la Dra. Marta Elena Ovejero -coordinadora de la mencionada Unidad- se realizó un recorrido desde donde la víctima sostuvo que arrojó a su madre hasta donde finalmente fue hallada.

Según se supo, el cuerpo hizo un recorrido de más de 10 kilómetros arrastrado por el agua, atravesó una compuerta para finalmente quedar enganchado en una rama.

Si bien el informe de la autopsia confirmó que Suárez murió ahogada, la fiscalía espera el resultado de los estudios histológicos que realizaron a las lesiones que tenía en la cara para determinar si fueron causadas por el camino rocoso del canal o por algún tipo de elemento.

Será sometido a rigurosas pericias psiquiátricas

Las fiscales, mientras trabajaron en la zona, tomaron declaración testimonial a familiares de la víctima y a los vecinos. Según se supo, la mujer tenía hijos de otro matrimonio.

Sobre la conducta del detenido, los lugareños revelaron que era muy agresivo con sus padres, quienes lo habían adoptado para no estar solos en la casa. Además dejaron entrever que habría estado internado en un hospital psiquiátrico.

Todos fueron coincidentes -incluso un hijo biológico de la víctima- en revelar que la causa de la molestia del imputado era el dinero. “Cuando no le daban plata se ponía agresivo”, sostuvo un testigo.

Con las entrevistas, la Fiscalía busca determinar si padece algún tipo de enfermedad mental o si comprende la criminalidad de los hechos.

Al respecto, Rubén Marconi (hijo de Palmira) habló con Noticiero 7 e indicó que fue su medio hermano quien le contó que su mamá no estaba. “Cerca de las cinco de la tarde nos avisa que ella (por Suárez) no había vuelto a la casa. Comenzamos a buscarla y ahí nos enteramos que habían encontrado un cuerpo en el canal de La Guarida”, expresó.

Rubén reveló que su hermano les había dicho que antes él habló con un curandero. “Nos decía que el curandero le había dicho que nos quedemos tranquilos que ella ya iba a volver”, enfatizó.

Antecedentes por amenazas y lesiones

Paz no era un desconocido en la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar de La Banda, puesto que estuvo detenido en el año 2014, cuando la víctima -junto con su esposo- lo denunciara por una golpiza.

El homicida confeso estuvo 15 días tras las rejas, ya que tras una discusión agredió a su madre y amenazó a su padre. En ese momento fue detenido y más tarde excarcelado con medidas restrictivas.

El acusado una vez que cumplió con la demanda judicial, según las averiguaciones del MPF regresó a la casa del matrimonio. El acusado era hijo adoptivo de la pareja. Según testigos, era un sujeto agresivo.