El hecho se ventiló a raíz del apasionado amor de una pareja que se concretó en Córdoba y que no se frenó a pesar de la confesión

El caso de Selva se produjo a raíz de una relación de amor entre una mujer, casada y residente en Córdoba, y un joven de la ciudad de referencia.

La situación tomó repercusión nacional, puesto que Selva se convirtió en la primera ciudad de la Argentina en ser aislada, como medida de prevención.

Un joven de 27 años, oriundo de Selva, estuvo en contacto íntimo con una mujer infectada, en Córdoba.

Allegados al caso contaron que el joven santiagueño había recibido una invitación por parte de la mujer -a quien conocía en su adolescencia- para que se encontraran en la ciudad de Córdoba.

Al producirse el encuentro ella le habría comentado que había dado positivo el examen del coronavirus, cuando estuvo en España, en un reciente viaje.

Sin embargo, ambos continuaron con el encuentro, hasta que él emprendió el regreso a Selva. Allí, sus amigos le habían organizado un “asado de bienvenida”, donde concurrieron más de una decena de personas.

En plena reunión y algarabía por el reencuentro, el viajero habría deslizado comentarios sobre lo que le contó la mujer de su tratamiento por el coronavirus en España.

En el acto, varios de los presentes cruzaron miradas inquisidoras, temerosos de un lógico contagio.

Fue así que después de la cena, uno de los presentes confió lo sucedido en la reunión a su familia y, después, decidió dar aviso a la Policía de Selva.

Cuando trascendió semejante novedad, autoridades de la provincia dispusieron que se iniciaran las investigaciones del caso. En ese sentido, se habría tomado contacto con el Gobierno de Córdoba, que identificó e hizo internar no sólo a la joven, sino también a su esposo.

Desde entonces, toda la población de Selva quedó en cuarentena. La medida indica que nadie entra ni sale, salvo para cargar combustible o para hacer las compras.l