Cayó el muro de silencio en barrio Belén y desalojaron a tres familias tras el incendio intencional Cayó el muro de silencio en barrio Belén y desalojaron a tres familias tras el incendio intencional
La Fiscalía habría determinado que el martes a la madrugada al menos seis individuos fueron los que prendieron fuego la casa de la familia Torres, causándoles heridas gravísimas a cinco niños.
Con ello, la fiscal Celia Mussi habría dado un paso decisivo, previo a refrendarse procedimientos tras los sospechosos.
Según la causa, todos tendrían antecedentes y “caídas” en la policía, pero no una por “homicidio en grado de tentativa”.
En esa imputación la funcionaria basa su estrategia, mientras mantiene preso a un vecino de apellido Martínez.
El mismo habría amenazado a la familia Torres el lunes: “Vayánse o les prendemos fuego la casa con ustedes adentro”.
Sin embargo, sólo habría sido un “mensajero”, ya que los vecinos proveyeron los nombres del resto de la “banda”.
Forzada mudanza
La odisea de los cinco niños convulsionó al barrio y el martes 150 vecinos firmaron un escrito, pidiendo que las cinco familias cercanas a los Martínez se fueran del lugar. Una dejó su casa ayer y dos más fueron conducidas por la policía a otro barrio.
Una de ellas, arribó al barrio Mama Antula, en La Banda, pero recibió una dura resistencia. En la siesta, al menos 30 personas se congregaron frente a la manzana N° 51 y exhortaron a la policía a pedirles que se retiraran.
Producto de los incidentes, policías de la Departamental N° 5 y la Seccional 56 de La Banda intervinieron para sosegar a los más exaltados.
Entre gritos y advertencias, la familia se marchó, pero dejó sus muebles.
Hasta tanto no vacíen totalmente la vivienda, los vecinos adelantaron que volverán a concentrarse hoy, trascendió.
Rezos y gravedad
Ajenos por completo de la tensión y la barbarie, los cinco menores continúan internados en el Cepsi.
Brevemente, se informó que tres se encuentran muy graves y los dos restantes, en Terapia Intermedia.
Los médicos deslizaron que las 72 horas posteriores (desde el martes a la madrugada) serían cruciales.
El cuadro de los menores conlleva quemaduras en distintas partes del cuerpo; en algunos, el fuego habría lesionado el sistema respiratorio; y también los afectó el monóxido de carbono.
Allí radica el presente cuesta arriba en el que batallan los cinco niños.
Afuera, el padre, Luis Alejandro Barraza, y la abuela, Elvira Torres, rezan y piden cinco milagros.l
