Un chico se tiró de un piso 11 por el reto viral ’Jonathan Galindo’

"Mamá, papá, los quiero pero tengo que seguir al hombre de la capucha", expresó niño de solo 10 años que se tiró desde un undécimo piso para seguir el reto viral conocido como Jonathan Galindo. "Lo siento, pero le tengo miedo", agregó el niño quien falleció inmediatamente.

Jonathan Galindo es un hombre con capucha negra, parecido al perro Goofy de Disney, que pide amistad en las redes sociales a gente muy joven y le lanza desafíos para que realicen algún reto viral con técnicas de persuasión muy estudiadas.

Este fenómeno nació en América y entró en España y Alemania, para acabar consolidándose en Italia, donde se ha cobrado su primera víctima mortal a través de un reto viral. ?La trágica noticia la dio a conocer el Corriere Della Sera, y el hecho ocurrió en la ciudad de Napoles.

La policía investiga el celular, la computadora y la consola de juegos del niño, además de prestar atención a comentarios hechos a amigos. Los padres descubrieron el cuerpo del niño luego de escuchar gritos de los vecinos y aseguraron que era un niño feliz pero en los últimos días "parecía tener algún tipo de preocupación".

Qué es Jonathan Galindo

Internet está llena de artículos y videos de Jonathan Galindo, una persona vestida con una capucha negra y cuyo rostro está escondido por una inquietante máscara similar a Goofy. Perfiles con la foto de Jonathan Galindo pedirían amistad a niños en Facebook, Instagram y Tik Tok, comenzando desafíos que podrían derivar en autolesiones y hasta suicidios.

La imagen comenzó a difundirse en 2012, cuando el creador de videos y experto en máscaras Dusty Scan publicó fotos en sus redes sociales con una máscara de Goofy. Las fotos comenzaron a hacerse virales y el propio Dusty Scan publicó un mensaje de advertencia.

La historia fue reconstruida por el Cicap (Comité Italiano para el Control de Declaraciones sobre Pseudociencia) y en 2017 esas fotos se usaron para crear una historia de terror según la cual una cuenta con el nombre de Jonathan Galindo para atraer a los niños a juegos cada vez más peligrosos. El caso volvió a popularizase cuando una cuenta inspirada en este creepypasta apareciera en TikTok.