La justicia brasilera impugnó la candidatura de Lula

Este viernes y en una sesión extraordinaria que duró más de 10 horas el Tribunal Superior Electoral de Brasil (TSE), impugnó la candidatura presidencial de Luiz Inácio Lula da Silva para los comicios del próximo 7 de octubre y en las que era el favorito a ganar según las encuestas. Lula, cumple por estas horas la pena a 12 años de cárcel dictados en la causa Operación Lava Jato en la que se lo acusó por corrupción.

Pasada la medianoche de Brasilia la mayoría del TSE adoptó la medida por seis votos contra uno e impugnó la candidatura del referente del Partido de los Trabajadores (PT), considerando que iba en contra de la legislación que prohíbe que una persona condenada en segunda instancia, se postule por un cargo electivo.

Ahora, el partido de Lula deberá designar un nuevo candidato y todo apunta a que sería el ex alcalde de San Pablo, Fernando Haddad, quien hasta el momento se encontraba como candidato a vicepresidente.

Por otra parte, se supo que el Tribunal le negó la posibilidad al partido de que utilice la imagen de Lula para realizar campaña en el horario gratuito de propaganda electoral designado para la radio y la televisión (que comenzó ayer), al mismo tiempo que informó que retirarán de las urnas electrónicas la foto y el nombre del referente.

“Estamos ante una operación simple de aplicación de una ley clara que consagra la inelegibilidad de alguien que ha sido condenado por un crimen contra la administración pública y lavado de dinero por un órgano colegiado”, señaló Luis Roberto Barroso juez relator del caso.

La mayoría del Tribunal rechazó los argumentos de la defensa que había solicitado que se permita “sub judice” la candidatura del expresidente, es decir, hasta que la condena del mismo fuese analizada en tercera instancia por el Superior Tribunal de Justicia o por el Supremo Tribunal Federal.

Cabe recordar que al igual que en encuestas anteriores, el sondeo más reciente de Datafolha ubicaba a Lula primero en la intención de voto con el 39% de apoyo, seguido de lejos por el exmilitar Bolsonaro del PSL, con el 19%. Marina Silva, una ecologista candidata del partido Red Sustentabilidad con el 8%, y el exgobernador del estado de San Pablo, Geraldo Alckmin, con el 6%.

Con un escenario sin Lula entre los candidatos, las encuestas ubicaban a Bolsonaro con un 22%, un 16% a Silva y un 9% a Alckmin.