Anoche durmió junto con otros detenidos y hoy viaja a la Capital

En minutos, el sospechoso asumió su realidad en la Seccional 28. Sin embargo, anoche, ésta tardaba en ser procesada por su nueva pareja.

A las 18, la mujer ingresó a la comisaría y los funcionarios le permitieron ver a "Chera" unos contados minutos.

Hoy, un letrado asumiría su representación y aconsejaría no declarar hasta tanto tener en claro la gravedad de los cargos y las pruebas en su contra.

Prima facie, los delitos serían "abuso sexual con acceso carnal", pero la defensa intentará contrarrestarlos apelando al viejo "estupro".

Está previso en el artículo N° 120 del Código Penal, con penas oscilantes entre 3 y 6 años de prisión.

Penalmente, en el caso del estupro, la Justicia protege y vela por la "inexperiencia sexual" de cualquier víctima.

Allí se plantaría la defensa. No es para menos. El Código fija en 6 años la eventual pena máxima, idéntico período en que se pruduciría la prescripción del delito.

Puesto en perspectiva, para la defensa el peor escenario asoma la supuesta violación a una niña de 12 años, pero aún culpable, el delito ya habría prescripto.

Mal que le pese, a los 16 habría nacido la segunda hija de la denunciante, también reconocida por el detenido.

Como la naturaleza de los delitos es autónoma, desde esa edad regiría otra figura, a la cual la defensa buscaría ensamblar su posición de sexo consentido.

A la larga, "Chera" declararía que siempre hubo consentimiento, valla que la Fiscalía deberá sortear para aspirar a un desenlace condenatorio.