La alimentación adecuada, la actividad física y los controles periódicos ayudan a prevenir enfermedades

La Lic. Celeste Mazzucco sugiere comer sano y variado para evitar enfermedades cardiovasculares.

En este sentido, la nutricionista indica: "Hay que evitar el consumo de bebidas azucaradas; en su lugar elige agua. Cambia los dulces y las golosinas por frutas frescas, postres lácteos light, etc. Incrementa el consumo diario de frutas y verduras, lácteos descremados, claras de huevo, carnes magras, sobre todo pescado de mar, legumbres y cereales integrales. Intenta limitar el consumo de alimentos procesados y envasados, por su alto contenido en sal, azúcar y "grasas malas". Hay que darle sabor a las comidas con condimentos aromáticos, ácidos y aliáceos".

Por su parte, Leguizamón pide aumentar el nivel de actividad física: "Hay que intentar realizar 30 a 60 minutos de ejercicio físico, mínimo 4 días por semana. Además de la actividad física diaria como jugar, caminar por trámites, usar escaleras, hacer las tareas domésticas, bailar, etc. Todas las actividades cuentan. Además hay que realizarse chequeos regularmente con el cardiólogo. Esto implica controlar los niveles de colesterol y triglicéridos. Mantener la presión arterial normal es primordial para tener un corazón sano. Realizar estudios cardiovasculares como electrocardiograma, pruebas de esfuerzo o ecodoppler cardíaco ayuna a prevenir ECV".