Errores más frecuentes al escribir en español Errores más frecuentes al escribir en español
Con motivo al Día Mundial de la Lengua Española, que se
celebra el 23 de abril en todo el mundo, un grupo de expertos
lingüistas elaboró un glosario con algunos de los errores ortográficos
y gramaticales más comunes a la hora de escribir
en esta lengua, como por ejemplo la palabra “yendo”, gerundio
del verbo ir que es muchas veces confundida por “llendo”,
una palabra que no existe.
La celebración, instaurada por la Organización de las Naciones
Unidas (ONU), tiene el objetivo de fomentar el mutuo entendimiento
entre las personas y dar a conocer la historia, la cultura y
el uso del español como idioma oficial, es por eso que lingüistas
de la app Babbel elaboraron una breve guía sobre los errores de
ortografía más comunes arremetidos contra la lengua de Miguel
de Cervantes.
A la cabeza de la lista de los errores se ubica el uso incorrecto
de palabras homófonas, aquellas que suenan igual al pronunciarse
pero que se escriben diferente, como por ejemplo “halla”, del
verbo encontrar, “haya”, del verbo haber, y “allá”, como un adverbio
de lugar.
Otro error habitual es el uso de mayúsculas innecesarias: solo
se escribe con mayúscula inicial los nombres propios, los títulos
y luego de algún signo de puntuación que lo amerite, ya sea después
del cierre de los signos de interrogación y de exclamación o
de un punto seguido, detallan los expertos.
Otra equivocación frecuente tiene que ver con la confusión
entre “valla”, que se refiere a una cerca y “vaya”, que corresponde
al verbo ir, mientras que “echo” se deriva del verbo echar
-despedir, arrojar, aplicar- y la palabra “hecho” únicamente hace
referencia a un suceso o acontecimiento.
Los lingüistas hacen referencia también a la tilde diacrítica,
aquella que se utiliza para distinguir palabras escritas de igual forma,
las cuales suelen ser monosílabos que tienen diferente significado:
como por ejemplo “aún”, adverbio de tiempo y “aun”, refiriéndose
a incluso; “quien”, pronombre relativo y “quién”, cuando
es interrogativo y exclamativo; lo mismo ocurre con “té”, para la
bebida o “te” como pronombre.
Otro error común, señala el glosario, es caer en redundancias,
es decir, el uso de términos similares tales como “deambular
sin rumbo”, “accidente fortuito”, “puños cerrados”, “subir arriba”
o “salir afuera”.