La experiencia de la navegación del río Salado La experiencia de la navegación del río Salado
Una de las aventuras más
impactantes para la transformación
de la región se dio en
estas tierras y en esto, aparece
el proyecto de la “Navegación
del Salado”.
La decisión de Justo José de
Urquiza, en el año 1852, que autorizó
la libre navegabilidad de
los ríos interiores, (precisamente
uno de los conflictos que tenía
con Rosas) desencadenó el
sueño de muchos dirigentes del
norte argentino, especialmente
de Santiago, Salta y Santa Fe, de
buscar una salida navegable del
río Juramento o Salado a través
del río Paraná, hacia el puerto
de Buenos aires.
Ya en esos momentos, los
dirigentes tenían en claro que
el poder residía en Buenos Aires
con la importación y exportación
de productos, allí funcionaba
la Aduana. Además había
un interés económico por el algodón
desde Estados Unidos,
ya que se país estaba sufriendo
las consecuencias de su guerra
interna entre las colonias.
de Buenos aires.
Ya en esos momentos, los
dirigentes tenían en claro que
el poder residía en Buenos Aires
con la importación y exportación
de productos, allí funcionaba
la Aduana. Además había
un interés económico por el algodón
desde Estados Unidos,
ya que se país estaba sufriendo
las consecuencias de su guerra
interna entre las colonias.
La experiencia de la navegación,
se puso en marcha en los
años siguientes con la presencia
del oficial de marina norteamericano
Thomas J. Page,
que con la colaboración económica
de los comerciantes Esteban
y Rupert Rams y Cia, más
el apoyo militar del Gral. Antonino
Taboada, empezaron a
realizar navegaciones de pruebas
desde Villa Matará.
Había muchas dificultades,
desde la profundidad del río,
las condiciones inapropiadas
del barco, los árboles en medio
del río, entre otros. Pero por fin
se cumplió el recorrido el 2 de
junio de 1856. La noticia llegó
al Gobierno Nacional quien
obsequió al Gral. Taboada una
medalla de oro por tan valiosa
gesta.
Lamentablemente todo este
proyecto quedó en la nada
en los años posteriores. Como
también en los años siguientes,
la frustrada navegación del
Bermejo. Todos estos impulsos,
como una manera de sacar
al interior de su letargo y
como una respuesta positiva a
lo que significaba el federalismo.
A modo de información y
de anécdota de todo esto, señalo
que la localidad de Icaño,
por ejemplo, antes de tener
ese nombre, se llamaba Esteban
Rams, y los pobladores del
norte de Santa Fe, en agradecimiento
a este comerciante impusieron
su nombre, en agradecimiento
por su desvelos en
aras del progreso. La pequeña
localidad de Esteban Rams,
hoy de unos 500 habitantes,
reconoce en este español, a uno
de sus precursores.
Descubrir nuevas verdades
Hay mucho por hacer en este
sentido, como también el de
seguir realizando investigaciones
de capillas, cementerios olvidados,
asentamientos aborígenes,
que están diseminadas
en todo el territorio provincial.
Por otro lado, hay que pensar
que en términos de descubrir
verdades, todo no está dicho,
este es el desafío, para
cualquier escuela del interior,
habrá que buscar una buena
motivación para que se lancen
a un trabajo de rescatar nuestro
patrimonio, y esa motivación
debe venir desde una nueva
perspectiva de la educación
provincial, que tiene que ver
con los regionalismos, será una
buena forma de enriquecernos
y mostrar una sana competencia
de acciones concretas en la
investigación
Es necesario ir dejando testimonio
de todo lo que va apareciendo,
carteles, monolitos,
etc. y pongo como ejemplo el
caso de Pitambalá, un asentamiento
aborígen, teatro de una
de las batallas más sangrientas
de nuestra historia, la que dio
comienzo el proceso de la Autonomía
en Santiago del Estero.
Treinta muertos, ochenta
heridos. En diciembre se cumple
200 años de esa gesta heroica,
olvidada. La circunstancia,
debería servir como un hecho
educativo trascendente,
para ejemplo de las generaciones
actuales y futuras, entender
que la Patria es sacrificio y
lucha. Es el momento del estudio,
de prepararse para honrar
a nuestros héroes.
Hay mucho por hacer, y como
lo dijo el Dr. Raúl Jorge Lima,
en el prólogo del libro, Paseando
por el Camino Real, todo
es de “ de final abierto”.
Reivindicación de la zona
En septiembre del 2013,
con la ley 7.131 se declaró a Villa
Matará, Pueblo Histórico
de la Provincia de Santiago.
Del Estero. En julio del 2015,
el Congreso de la Nación, con
la intervención unánime de
los diputados nacionales por
Santiago, sacar una resolución
donde se declara de interés cultural
esta temática, de rescatar
la historia de pueblos antiguos.
En esa misma línea de trabajo,
la Cámara de Diputados
de la Provincia, en el mes de
octubre de 2015, aprueba la ley
7.181, que declara a Villa Robles
como “Pueblo Histórico”.
Con el mismo criterio y con
la participación de muchos diputados
y comisionados municipales,
el 7 de junio de 2016, se
sacó la Ley 7190, por la que se
declara “Región Histórica”, la
margen izquierda del río Dulce,
en el espacio comprendido
entre las localidades de La Bajada
(Banda) hasta Pitambalá
(San Martín). l
Raúl Jorge Castillo
El autor de “Los pueblos antes
de las vías” recurrió al trabajo
realizado por historiadores
y también de estadísticas.
Tal es el caso del antropólogo
José Togo, en un trabajo auspiciado
por la Unse, “Santiago del
Estero una mirada ambiental”,
manifiesta en el Capítulo de
Asentamientos Humanos, donde
indica que “… sobre los cursos
de los ríos Dulce y Salado,
se ha desarrollado gran parte
de la historia humana provincial,
que tiene una antigüedad
de mayor a los 8.000 años…”.
Allí también señala también que
“solo en sus márgenes pudieron
haber prosperado poblaciones
sedentarias de agricultores”.
También, recurre al libro
“Matará” de la Dra. Amalia Gramajo
y Hugo Martínez Moreno.
También el historiador Raúl
Bazán, en su comentario preliminar
de la Historia de Santiago
del Estero, de Antonio V.
Castiglione; y “La Industria en
Santiago del Estero”, obra de
la Dra. María Mercedes Tenti
de Laitán.
Sus últimos trabajos “Los
pueblos antes de las vías” y
“Paseando por el Camino Real”
fueron declarados de interés
cultural por votación unánime
en la Cámara de Diputados de
la Nación. l