Los escribanos, una pieza clave en las denuncias sobre usurpaciones de tierras Los escribanos, una pieza clave en las denuncias sobre usurpaciones de tierras
Por ese motivo, de un tiempo a esta parte, se ha posado la vista sobre varios notarios del fuero local, cuyos nombres se repiten en las denuncias por usurpación de tierras, tanto fiscales como privadas.
Hay patrones que se repiten en varias de las causas que se abrieron en los últimos años , en todas ellas figuran protocolos de escribanos que no son tales, firma de gente ya muerta, escribanos dando fe de propiedades y documentos sugestivos y constantes apariciones de libros y registros antes denunciados como extraviados.
Uno de los casos emblemáticos fue el de la denuncia por ocho departamentos brasileños, que fueron entregadas a cambio de tierras en la provincia, que resultaron ser terrenos fiscales, en la operatoria de los pisos uno de los primeros vendedores de campos es un vecino de Las Termas, quien en la realidad murió en 1956.
Pero eso no es todo, el escribano de Las Termas que inscribió la operación, también murió varios años atrás.
De acuerdo con lo que deslizó uno de los funcionarios judiciales que tiene a cargo la investigación de dos notarios, otra maniobra repetida por algunos escribanos acusados consiste en trasladar responsabilidades a sus empleados, o bien gestores. Alegan excesiva confianza y se reconocen burlados en su buena fe.
Decenas de demandas
Las denuncias en contra de los escribanos se acumulan en los escritorios de los jueces que deben trabajar a destajo para desentrañar las complejas operaciones apócrifas y establecer las responsabilidades.
Las causas más reconocidas son ochos, todas referidas a inmuebles urbanos, aunque una de ellas involucra a casi una decena de departamentos en Brasil que fueron entregadas como parte de pago en la compra de terrenos fiscales en el país.
Las otras se refieren a la venta de tierras en los departamentos Pellegrini, Copo y Alberdi. El último eslabón acaba de motorizarse ante Tarchini Saavedra e involucraría a 1.200 hectáreas, también en Pellegrini.
En todas las investigaciones, los denunciantes manifestaron que el ardid habría partido desde una escribanía: aún cuando hasta el momento sólo hubo declaraciones testimoniales, las acusaciones tienden a desembocar en sus imputaciones por “defraudación y adulteración de instrumento público”.
Según los denunciantes, en todos los casos intervendrían varios personajes: lugareños encargados de marcar tierras prósperas, eventuales empresarios ávidos de comprar a bajo costo y escribanos resueltos a llevar adelante la documentación.
Operaciones poco claras
Ahora bien, aquí es cuando la Justicia se apresta a depositar su mayor atención: Falco tiene en su despacho una causa en que un escribano fue acusado de fraguar un poder, con el cual materializó la permuta de ocho pisos brasileños con tierras santiagueñas.
La empresaria denunciante, una cordobesa radicada en Brasil, acusa al profesional de haber falsificado su firma y la magistrada se apresta a concretar una pericia trascendente en Gendarmería Nacional.
ésta asoma clave: de confirmarse la denuncia, es muy posible que la jueza impute al escribano.
A tanto se acentúa la expectativa que próximamente arribará a Santiago la propia empresaria denunciante, quien ya habría hecho una pericia propia que encomendó a una perito del medio.
Se sabe que el resultado confirmó su presunción.
En forma simultánea, el abogado de la denunciante se apresta a hacer nuevas presentaciones, pidiendo detenciones y el traslado de cordobeses, a quienes atribuye ser parte de una supuesta organización abocada a la búsqueda de tierras bien lejos de la capital.
