Semblanza del prestigioso abogado y empresario santiagueño

Ha muerto Nestor Ick. Una personalidad que contribuyó de un modo decisivo a la forjar esa realidad pujante y progresista que es hoy Santiago del Estero. Su rica trayectoria como abogado, empresario y emprendedor de la sociedad civil sintetiza de modo cabal la respuesta de la provincia a los desafíos de un tiempo de transformaciones profundas.

El aporte de Ick a la construcción de algunas de las grandes empresas santiagueñas, siempre a la vanguardia en campos tan diversos como el desarrollo de la actividad financiera, bancaria y aseguradora, los servicios públicos, la energía, el campo, la infraestructura, el turismo, la prensa, la cultura y los medios audiovisuales trascendieron largamente los límites de la provincia y de la región.

A nivel nacional fue un pionero en la incorporación de las más modernas técnicas de gestión en sus empresas, además de un adelantado en la revolución tecnológica de las comunicaciones. El empresariado nacional así lo reconoció y lo incorporó desde un principio como una de sus figuras centrales.

Quienes lo conocimos, lo recordaremos, ante todo, como un gran abogado. Por su vocación su talento y su creatividad fue uno de los principales protagonistas de la profesión en el país.

Por, sobre todo, fue también un ciudadano, en el sentido más alto y cabal de la expresión. Ninguna causa pública le fue ajena. Luchó por ellas todas ellas con inteligencia y compromiso ejemplar. Sobre todo, en momentos difíciles para la provincia, cuando fue necesario afirmar y defender los valores y la identidad de común amenazada.

Su amor por la provincia, su confianza sin límites en el futuro de Santiago del Estero merece hoy el más alto homenaje y reconocimiento.

Para Nestor, el recuerdo afectuoso de todos quienes lo conocieron y acompañaron.