El ex golero Carlos Catania es el protagonista de esta emotiva historia que guarda un sentimiento muy especial.
Regaló la camiseta de arquero autografiada por Fillol y se la devolvieron 44 años después Regaló la camiseta de arquero autografiada por Fillol y se la devolvieron 44 años después
Carlos Catania fue un eficiente arquero de Primera División de la década del 80 en el fútbol santiagueño y uno de los tantos que trascendió por su gran nivel y trayectoria.
Pero para sorpresa de todos en ese tiempo, se retiró a los 27 años y con la tristeza y la impotencia de haberlo hecho en el mejor momento de su carrera.
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San Martín de Tucumán fue su último club y antes había debutado con 17 años en Central Argentino de La Banda. Tuvo pasos por Central Córdoba, Altos Hornos Zapla de Jujuy y Sarmiento de Junín.
Hoy tiene 63 años y vive rodeado del afecto y el amor de su familia.
Pero al margen de lo que fue su historia con el fútbol, esta semana fue protagonista de un acontecimiento que jamás hubiera imaginado que podía pasar: reencontrarse con la camiseta de arquero que usó todo el torneo en el que terminó siendo subcampeón de la Liga Santiagueña de Fútbol con Central Argentino de La Banda.
"Por un punto nos ganó Central Córdoba el campeonato. Le habíamos ganado 2 a 1 a Mitre en su cancha con Central Argentino y teníamos la esperanza de ser campeones aquella vez, pero no pudo ser", expresó Catania cuando recordó con nostalgia esa apasionante definición en la charla con EL LIBERAL.
Y fue ahí dónde utilizó por última vez la indumentaria que era muy especial para él por otra razón: era la que había lanzado autografiada a traves de una línea de ropa deportiva (Zeus) al mercado argentino, el campeon del mundo del 78 con la Selección Argentina, Ubaldo Matildo Fillol.
"Imagínate si no me costó regalarla después del partido con Mitre. Le había prometido al periodista Juan Manuel Martínez que le iba a dar y así fue", agregó.
Todo cambió esta semana y después de casi 44 años, Catania tuvo otra vez en sus manos la camiseta de arquero con la que había atajado todo un campeonato.
"Cuando Martínez llegó por la noche a mi casa, y después de charlar un rato, me dijo que tenía algo especial para mí. Era la camiseta con la que atajé siempre y no lo podía creer. Volverla a tener en mis manos después de caso medio siglo, me llenó de alegría y felicidad. Ahora estoy viendo qué voy a hacer con ella. Tengo 73 años y en una de esas me pongo para jugar uno o dos partidos en la liga amateur y después hacerla enmarcar", finalizó.
