Se descartan las primarias en la provincia de Buenos Aires

Con una amplia mayoría, la Legislatura de la provincia de Buenos Aires aprobó la suspensión de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) previstas para este año. La iniciativa fue respaldada por más de dos tercios de los legisladores, en una sesión que había sido reprogramada tras el fallecimiento del papa Francisco.

Además del aval a la suspensión de las primarias, el debate parlamentario dio inicio a una negociación crucial en torno a la modificación de los plazos contemplados en el artículo 61 de la ley electoral 5109, una demanda impulsada por la Junta Electoral provincial.  

El consenso alcanzado en la Cámara de Diputados bonaerense permitió avanzar con la eliminación temporal de las PASO. Concluido este paso, el foco se desplazará hacia la revisión del calendario electoral, ya que la Junta Electoral presentó una solicitud formal para extender los plazos actuales, alegando limitaciones operativas.

Durante la sesión, hubo manifestaciones de rechazo por parte de los bloques de Izquierda y de algunos sectores del oficialismo. Lucía Klug (Unión por la Patria - Patria Grande) y Ricardo Lissalde (Frente Renovador) votaron en contra. Lissalde, alineado con Sergio Massa, fue uno de los pocos oficialistas que se desmarcó del apoyo mayoritario.

Desde el bloque oficialista, el diputado Gustavo Pulti, referente de Axel Kicillof, sostuvo que la ampliación de los plazos resulta esencial tras la suspensión de las PASO: "Algunos actúan como hienas en el barro. La Junta Electoral ya advirtió que necesita más tiempo que el que contempla la ley vigente", expresó.

La normativa actual establece solo 30 días entre el cierre de listas y los comicios, mientras que la Junta propone extender ese lapso a 50 días. El gobernador Kicillof, en su proyecto original, había planteado incluso una distancia de 70 días, argumentando que la ley vigente —que data de la década de 1940— no se ajusta a las condiciones actuales.

Desde La Libertad Avanza, el diputado Sebastián Pascual acusó al oficialismo de dilatar la discusión por conflictos internos: "No nos hagan cargo a todos los bonaerenses de su interna", reprochó. Una crítica similar realizó Laura Cano, del PTS-FIT, quien calificó el proceso legislativo como un "espectáculo obsceno" y denunció que estas maniobras sólo "alimentan a la casta".

Susana González, legisladora cercana a Kicillof y parte del Movimiento Derecho al Futuro, lamentó los obstáculos que enfrentó la propuesta oficial: "No puedo tolerar que seamos nosotros mismos quienes trabemos al gobernador. La Junta Electoral convocó a los presidentes de bloque y el nuestro ni siquiera asistió. Eso duele", denunció en un encendido discurso.

Este martes, la comisión de Reforma Política de Diputados recibirá a las autoridades de la Junta Electoral, en una reunión clave para definir los nuevos plazos. Estarán presentes la presidenta de la Suprema Corte bonaerense, Hilda Kogan, la vicegobernadora Verónica Magario y el titular de la Cámara de Diputados, Alexis Guerrera.

Según fuentes legislativas, el debate para modificar los plazos se resolvería en un plazo de entre diez y quince días tras la suspensión de las PASO. Sin primarias, entrarán en vigor los tiempos de la ley electoral a partir de la fecha que fijó el gobernador para las elecciones provinciales: el 7 de septiembre.

No obstante, existen tensiones internas respecto de la estrategia del Poder Ejecutivo bonaerense. Negociadores legislativos advirtieron que el proyecto para reformar la ley fue enviado al Senado sin contar previamente con los votos necesarios. La Cámara alta aprobó únicamente la suspensión de las PASO, omitiendo los artículos que modificaban los plazos electorales.

Además de las diferencias dentro del peronismo, en particular con el sector referenciado en Cristina Fernández de Kirchner, el oficialismo necesita construir acuerdos con los principales bloques opositores: Unión Cívica Radical (UCR), Propuesta Republicana (PRO) y La Libertad Avanza (LLA). Para habilitar el tratamiento de una modificación legal se requerirá el apoyo de dos tercios de los legisladores presentes en el recinto.

Hasta el momento, no se ha definido si se enviará un nuevo proyecto desde el Ejecutivo o si algún legislador presentará una iniciativa propia. En Diputados consideran que "si hay un proyecto del Gobernador es más ordenador", aunque reconocen que cualquier negociación podría incluir demandas opositoras, como designaciones en la Suprema Corte bonaerense o en el directorio del Banco Provincia, detalla el portal de Infobae.

La Secretaria General de Gobierno, Agustina Vila, y la vicegobernadora Magario conducen las conversaciones políticas para intentar arribar a un acuerdo. Desde la oposición señalan que esperan una convocatoria formal y advierten que no consideran imprescindible modificar los plazos si no se plantean argumentos técnicos convincentes.

Este lunes finalmente se terminó de resolver el trámite iniciado en el Senado bonaerense. Ahora, se iniciará una carrera contra el tiempo para definir un nuevo calendario electoral. La elección bonaerense, desdoblada de las nacionales, tendrá lugar dentro de poco más de cuatro meses y movilizará a más de 13 millones de votantes.