Santiago del Estero también le abrió las puertas a una actividad que de a poco se está haciendo notar. EL LIBERAL habló con un pionero de la disciplina griega y reveló algunos de sus secretos.
Calistenia en Santiago: Vencer miedos con el propio peso Calistenia en Santiago: Vencer miedos con el propio peso
Parece extremadamente una locura, todo lo que dominan con la fuerza de los brazos en el aire, pero para ellos es algo que no significa un obstáculo difícil de vencer.
Es más, son atletas amateurs que en cada ejercicio sobre barras de diferentes tamaños, alturas y características, son capaces de hacer maniobras que representen la forma en que ellos disfrutan y viven sin temores y prejuicios esta atrapante disciplina.
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Saben que siempre están y van al límite con los ejercicios y que un mínimo error en los cálculos de precisión o fallas en el contacto con el piso, por ejemplo, pueden resultar muy peligrosos para su integridad física.
Pero más allá de eso, los que hoy practican un deporte que se instaló hace un tiempo en Santiago del Estero, admiten que hay tres factores que son clave para que la destreza y la habilidad tuvieran su mejor efecto: la fuerza y el control en los brazos y piernas; la agilidad y equilibrio en los movimientos, y la resistencia que se necesita para que el cuerpo actué sobre su propio peso.
Es la poca conocida calistenia, un deporte que se asemeja bastante a las técnicas de la gimnasia artística, pero tal vez con un sentido más de calle o urbano. El desafío es tratar de estar lo más cerca de la acrobacia y de ser un deportista que atente sobre todo contra los miedos.
"La calistenia se define como una disciplina deportiva que se basa fundamentalmente en la ejecución sobre barras de ejercicios con el peso corporal únicamente. Eso no quiere decir que sea exclusivamente así, pero siempre el objetivo es el dominio y el control del peso corporal", explicó el profesor Nahuel Cisneros, uno de los pioneros de la actividad en Santiago y practicante con gran experiencia en el ambiente local.
La pasión por esta actividad, que busca afirmarse a paso lento y ser tenida en cuenta por los deportistas, llevó a Nahuel y a su hermano Rubén a abrir en su casa del barrio Borges, primera ampliación, un gimnasio exclusivo para la calistenia.
"Se dio así porque antes iba a otros lugares para enseñar la calistenia. También lo hacía virtualmente y personalizado. Hoy tengo 20 alumnos y con características diferentes para realizar las prácticas", expresó el entrenador que, además, cumple la función de juez de la disciplina en Santiago.
Ya con un trabajo hecho y una formación técnica y física en avanzada, todo es mucho más fácil para los practicantes que buscan incluso un cambio de imagen, hábitos y de estilo de vida.
"No es complicado la práctica. Solo hay que tener voluntad y ganas de aprender. Conozco casos que muchos decidieron venir a mi gimnasio porque sentían que debían romper un poco la monotonía o el sedentarismo. Hoy varios de los chicos están preparados para competir y es algo que queremos hacer", agregó Nahuel, estudiante también de la carrera de Ingeniería Civil.
Como en todo proceso, la idea de la superación siempre está latente y en la calistenia no es la excepción.
"Aquí también hay que tener tiempo y paciencia. Como los ejercicios se ajustan a varios factores, lo ideal es que el proceso se vaya dando paso a paso y evitar en lo posible las lesiones musculares que son propias de este deporte", acotó.
La calistenia también se rige con un reglamento y son los jueces los que tienen toda la facultad para evaluar y calificar a los atletas en las competencias.
"La técnica y el despliegue en los movimientos de los atletas son clave para la evaluación y determinar el resultado final", indicó Nahuel que aclaró que los ejercicios más comunes que hacen de base son las flexiones de brazos, fondos y las sentadillas por ejemplo.
Santiago no deja de ser una plaza abierta a la práctica de la calistenia, pero hace falta un poco más. Por tratarse de un deporte sin mucho campo de acción, salvo el que le da vida en el barrio Borges, todo lo demás se traduce en entrenamientos que se desarrollan en plazas o parques de la ciudad.
"Por ahí la desventaja está en que los crucijuegos no reúnen las características apropiadas o adecuadas para la práctica de la calistenia específica. Los chicos iguales los usan y no está mal tampoco. Siempre la idea es estar muy activos", añadió Nahuel.
Al margen de que la calistenia está en la búsqueda de sumar adherentes, tampoco deja de ser una buena señal que haya grupos de atletas de Santiago que salieron del ambiente del gimnasio cerrado para darle lugar a la calistenia al aire libre.
"Hoy hay chicos del barrio Jorge Newbery, Villa del Carmen y San Germés que están haciendo un trabajo muy interesante para que la calistenia pueda cobrar un mayor protagonismo en Santiago. Es el deseo de todos y ojalá se pueda dar", anheló uno de los que sueña con que la calistenia tenga en el futuro más peso que nunca.
HOY EN SANTIAGO PREDOMINA LA ACCIÓN MASCULINA
Captar el interés de las mujeres, es el deseo de las calisténicos
Siendo que la calistenia nació en la antigua Grecia, donde se entrenaba a los soldados para tener mayor agilidad y movilidad en la guerra, hoy en Santiago se instaló el modelo, pero con la diferencia de que todo lo que se hace es prácticamente por pasión y diversión.
El entrenador Cisneros también rescató la participación del público femenino en la calistenia aunque esta situación se está dando un poco más en otras provincias de la Argentina.
"Hoy donde más actividad tiene la calistenia es en Buenos Aires y Córdoba, por ejemplo. En Santiago el impacto todavía se hace esperar", indicó.
Sobre la inclusión de las mujeres afirmó: "Hoy hay torneos que se están organizando exclusivamente para ellas. Lo mismo pasa con los gimnasios, donde las damas son las principales protagonistas, ya que solamente ellas pueden concurrir. Ojalá que en Santiago se pueda dar una situación especial y podamos tener más público femenino en la calistenia".
TESTIMONIOS
"La calistenia me hace muy bien. Los ejercicios me dieron mayor movilidad y agilidad. También juego al fútbol y es un buen complemento para mí. Siempre entrené para jugar al fútbol, pero una vez que empecé a ver videos de calistenia en Internet sentí que también podía hacerlo. Antes iba al clásico gimnasio a levantar, aunque después me di cuenta de que me restaba movimientos, sobre todo en la cancha de fútbol. Ahora hago los dos deportes al mismo tiempo y me va bien", (Juan Viera, 56 años, y vive en el barrio Cabildo).
"De la calistenia nació la gimnasia artística que hoy vemos en los Juegos Olímpicos. La practicaban en los siglos anteriores los espartanos y los griegos, pero quienes le dieron visibilidad como deporte fueron los rusos y los croatas, que luego pasaron a ser circenses. Se practica preferentemente en la arena para amortiguar cualquier caída y se trata en su totalidad del ciento por ciento del control corporal. Yo la practico porque me gusta más que las pesas", (José Amil Feijóo, 40 años y vive en el barrio Ejército Argentino).












