Caos en Austria: Fuego, choques y abandonos en el GP de Fórmula 1 Caos en Austria: Fuego, choques y abandonos en el GP de Fórmula 1
El Gran Premio de Austria tuvo un arranque caótico en el circuito de Spielberg que rápidamente encendió las alarmas en el paddock. Apenas iniciado el domingo de carrera, tres pilotos se vieron forzados a abandonar, entre ellos el tricampeón mundial Max Verstappen, el español Carlos Sainz y el joven italiano Kimi Antonelli.
La jornada comenzó con un infortunio para Carlos Sainz, actual piloto de Williams, quien ni siquiera pudo tomar la largada. Su monoplaza, el FW47, presentó un problema de sobrecalentamiento que terminó con humo saliendo del auto y, poco después, con fuego en la zona trasera mientras el español ingresaba al 'pit lane'. A pesar de los esfuerzos del equipo, se confirmó que no podría disputar la competencia.
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El caos no se detuvo ahí. Apenas se apagaron las luces del semáforo y comenzó oficialmente la carrera en el Red Bull Ring, Kimi Antonelli (Mercedes), de apenas 18 años, protagonizó un fuerte incidente al impactar a Max Verstappen (Red Bull), uno de los favoritos al podio. Ambos monoplazas quedaron fuera de combate, provocando una bandera amarilla temprana y alterando drásticamente las estrategias del resto de la parrilla.
"El tráfico era muy denso delante mío, intenté frenar pero bloqueé las ruedas traseras y perdí el control. Fue un desastre", explicó Antonelli tras la carrera. "Pude disculparme con Max. No estuvo bien, no quería arruinar su carrera, ni la mía".
La lista de abandonos continuó creciendo en la vuelta 17, cuando Alex Albon (Williams) también debió desertar tras un fallo técnico en su coche, lo que elevó a cuatro el número total de pilotos que no completaron la carrera.
En contraste con el desconcierto inicial, Lando Norris (McLaren) supo capitalizar las circunstancias y se llevó una contundente victoria en Austria. Por su parte, el argentino Franco Colapinto logró finalizar en el puesto 15, en una jornada marcada por la tensión, los errores y los infortunios mecánicos.
El GP de Austria deja muchas preguntas para los equipos involucrados, especialmente para Williams y Mercedes, que deberán analizar tanto los errores técnicos como los humanos en un fin de semana para el olvido.
