La víctima, Leonardo Ariel Gallardo, habría sorprendido a Héctor Orlando Alurralde junto con un cómplice para quitarle el rodado y los bienes que llevaba. Allí se generó un forcejo y terminó mortalmente herido.
Un peligroso delincuente fue asesinado cuanto intentaba robarle la bicicleta a un sereno Un peligroso delincuente fue asesinado cuanto intentaba robarle la bicicleta a un sereno
Un joven, con un frondoso prontuario y graves problemas de adiciones a las drogas, murió asesinado por un sereno cuando intentó quitarle la bicicleta mientras circulaba por el barrio Campo Contreras, en horas de la madrugada.
El homicidio se conoció cerca de las 5.45 de la madrugada de ayer cuando la policía recibió un llamado telefónico que indicaba que en una zanja cerca de la colectora de Leopoldo Lugones y Luis Barrios en el barrio Juan Díaz de Solís había una persona si vida.
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Cuando los uniformados llegaron al lugar hallaron a Leonardo Ariel Gallardo —de 25 años, residente en la zona— tirado en el suelo, al borde de la acequia, con la cara cubierta con un cartón, los pies cruzados, ya sin vida.
Junto a la víctima se encontraban sus amigos Ignacio Gramajo —alias "Chicho"— y Juan Ignacio Pérez, quienes indicaron que sacaron a la victima de la acequia. Más tarde llegó su madre, Argentina Gallardo.
En ese momento los paramédicos constaron la muerte de Gallardo, por lo que los uniformados se comunicaron con la fiscal de turno —Dra. Silvia Jaime— quien dispuso que se preserve el lugar del hecho hasta tanto llegue el médico forense, peritos de Criminalística y personal del Departamento Homicidios y Delitos Complejos.
Mientras las pericias se llevaban a cabo en el lugar donde estaba el cadáver, los detectives se entrevistaron con "Chicho", quien contó que se encontraba deambulando con Gallardo por Lugones y en un determinado momento la víctima intentó robarle a un hombre —que hasta ese momento era desconocida su identidad—que circulaba en bicicleta.
Allí, según los dichos de "Chicho" se trenzaron en lucha y Gallardo recibió un cuchillazo. Por parte Juan sostuvo que se encontraba en su casa cuando Gramajo —su primo— le pidió ayuda porque habían "apuñalado" a Gallardo.
Expresó que entre ambos lo sacaron de la acequia y lo recostaron sobre la vereda de colectora. Más tarde Juan fue a buscar a la mamá de Gallardo, quien trató de auxiliarlo pero ya estaba sin vida.
Con el afán de dar con el agresor, los investigadores analizaban cámaras de seguridad de la zona y tomaban declaración a testigos, pero todo el panorama se aclaró cuando Héctor Orlando Alurralde se presentó en la Comisaría 11 e informó que habían intentado asaltarlo.
Alurralde —de 61 años, residente en el Bº Siglo XXI— expresó a los uniformados que trabajaba como sereno en la Cerámica Santiago y cuando se desplazaba en su bicicleta dos sujetos intentaron asaltarlo.
Según la denuncia de Alurralde, en ese momento se trenzó en lucha con uno de sus agresores y lo lesionó. Inmediatamente, los ojos de los investigadores se posaron sobre el sereno, quien quedó aprehendido.
Más tarde, los uniformados realizaron una inspección ocular donde se produjo el asalto y desde allí secuestraron un cuchillo con restos de sangre. Hasta el momento los investigadores desconocían si el arma blanca era de Gallardo o de Alurralde.
Informe médico de Sanidad
Por orden de la representante del Ministerio Público Fiscal, el cadáver fue examinado por la Dra. Ali'ne Suasnábar —médica de Sanidad policial— se hizo presente en el lugar y constató que Gallardo tenía una "herida horizontal importante, punzante penetrante".
La profesional reveló que la lesión estaba "situada sobre hemitórax izquierdo entre 4-5 espacio intercostal y línea medio clavícular. De 8 a 9 centímetros de extensión, bordes bien definidos, se observa escaso sangrado al movilizar el cuerpo para su examen. De 4 a 5 centímetros de profundidad atravesando cavidad torácica".
Además explicó que "por debajo de lo descripto presenta cicatriz de data anterior con similar extensión. Impresiona contusión en brazo derecho y otra región lumbar izquierda", sin rigidez cadavérica, indicado que llevaba entre 1 y 3 horas sin vida.
Tenía 14 causas en su contra
El "Negro" como era llamado por sus familiares y amigos no era una persona desconocida tanto para las autoridades judiciales como policiales ya que su planilla de antecedentes delictiva era bastante extensa.
Fuentes cercanas a la investigación —que está a cargo del Departamento de Homicidios y Delitos Complejos— revelaron que sobre Gallardo obraban más de 14 causas por diferentes hechos delictivos, siendo la mayoría de ellos hurtos, arrebatos y robos.
La Fiscalía ya había solicitado la detención de Gallardo en otras oportunidades. Según sostiene la investigación judicial sobre su muerte, al momento de ser herido también pretendía cometer un arrebato.
"Jamás pensé que estaba muerto, consumía desde los 14 años"
Tras conocerse el asesinato, la familia de Ariel se mostró desconsolada. Allí Gastón —hermano de la víctima— en diálogo con Noticiero 7 reconoció que tenía problemas de adicción y con otras patotas de la zona: "Consumía mucho, desde niño. Lo habían intentado rehabilitar y estuvo internado cerca de dos meses. En la primaria dejó la escuela. Tengo también una hermana adicta, todavía no puedo creer lo que ha pasado".
Además, reveló que Ariel "tenía un plan que cobraba, pero no trabajaba". Por su parte, su mamá —Argentina Gallardo— quien halló el cuerpo, sostuvo que "estaba durmiendo cuando su amigo fue a buscarme".
"Juan (amigo de su hijo) me gritaba desde afuera y cuando salgo me dice 'eh vamos al "Negro" lo han hincado cuando andaba con "Chicho". Me puse las zapatillas, cuando llegué tenía una herida en la tetilla, le tapé la herida con una remera. Le pegué en la cara y le gritaba 'Negro, Negro' , pero no reaccionaba. Corrí a buscar ayuda y cuando regresé ya estaba la policía", dijo Argentina, abatida por la tragedia.
"Yo pensaba que se quedó dormido porque hacía 4 o 5 días que andaba consumiendo. Jamás me imaginé que estaba muerto. Consumía desde chico, a veces pasaba cuatro o cinco días sin aparecer. Habrá empezado a consumir a los 14 años. A veces estaba 15 días internado, pero cuando salía caía en lo mismo, tenía la misma junta".
Argentina dijo que su hijo estaba durmiendo cuando un vecino, que reside en la esquina de la casa llegó a buscarlo. "Mi hija me dijo que él ya estaba acostado, pero un chico de la esquina vino a buscarlo y salió", sostuvo. "Yo hablaba con él y me decía que ya se iba a recuperar, pero nunca lo hacía. Consumía cocaína. Compraba en otros barrios. Tengo otra hija con problemas de adicción, yo me pongo la familia al hombro vendiendo comida", dijo la mujer.
